Más de veinte chatarras de patrullas policiales, que estuvieron acumulándose en la sede de la Policía Municipal de El Hatillo (PoliHatillo) desde hace 18 años, comenzaron a ser trasladadas a un estacionamiento judicial, con el fin de despejar la amplia área que ocupan y así mejorar las condiciones laborales de los funcionarios policiales.
“La remoción de estas chatarras fue un compromiso que adquirí en el año 2013 cuando era candidato a alcalde y visité este cementerio de patrullas. Hoy, esta promesa es una realidad”, manifestó el alcalde David Smolansky mientras comenzaba el traslado de la primera chatarra.
“Cuando falta un año para la inauguración de la nueva sede de PoliHatillo, con estos traslados de chatarra estamos contribuyendo modestamente a tener la policía que los hatillanos se merecen, que sea referencia para todo el país”, agregó el alcalde.
Entre los vehículos que serán enviados a resguardo y custodia, se encuentran diez unidades Range Rover Fender, siete Dodge Caliber, cinco camionetas Jeep Cherokee, cuatro Toyota Machito de chasis corto, un Volkswagen Santana, un Fiat Tempra y un camión Ford Tritón.
Estas patrullas, que comenzaron a caer en estado de abandono en el año 1998, están siendo trasladadas a un estacionamiento judicial certificado por el Instituto Nacional de Transporte Terrestre, ubicado en Mampote, estado Miranda, para comenzar el proceso legal de desincorporación de las mismas, pues ninguna de ellas es recuperable.
La remoción de estos vehículos permitirá reacondicionar la amplia área que estaban ocupando en la sede de PoliHatillo, en la Calle El Cementerio de Oripoto.