Antes un estado indefinido en las elecciones presidenciales, Colorado está al borde de volverse demócrata. La causa del giro podría ser Donald Trump.
Las declaraciones desdeñosas del virtual candidato republicano sobre los mexicanos, sus comentarios sobre las mujeres y su débil organización electoral han impulsado el giro del estado.
Colorado era objeto de arduas disputas, pero ahora es un campo favorable a los demócratas. Por primera vez en 20 años, son más los padrones demócratas superan a los republicanos.
«Trump se está malquistando con todos los grupos cruciales de votantes en este estado», dijo el ex presidente del Partido Republicano estatal, Dick Wadhams. «Debo decir que Trump tiene problemas».
Y no es solo en Colorado. La retórica candente del candidato y su débil estructura organizativa podría determinar que Nevada y New Mexico, tres estados en disputa que parecen estar fuera de su alcance.