Ya son cerca de 17 casas de abuelos, en lo que va de año, que han sido robadas
El presidente de Abuelos Miranda, Luis Francisco Cabezas, calificó de “preocupante” la situación económica y social por la que está atravesando el país, dado que a su juicio la escasez de alimentos y las altas cifras inflacionarias han ocasionado que se incremente la inseguridad en Venezuela.
Destacó que sólo en las últimas semanas, varias de las Casas de Abuelos que pertenecen al Gobierno de Miranda han sido robadas por delincuentes, quienes han sustraído incluso la comida destinada a la población adulta mayor. Señaló que los casos más recientes han sido en Filas de Cúa y Guarenas.
“Anteriormente los robos a residencias se caracterizaban porque se sustraían electrodomésticos, joyas o equipos electrónicos y de tecnología; sin embargo, ahora el robo de comida es el común denominador en muchos planteles e instituciones como estas”, advirtió.
Cabezas indicó que ya son cerca de 17 casas de abuelos, en lo que va de año, que han sido robadas. “En todas notamos el mismo modus operandi, que es el robo de la comida. Nuestro programa funciona con un sistema de abastecimiento en el que las asociaciones civiles son quienes deben hacer colas en los mercados para comprar los alimentos y esto es un duro golpe. El hampa está viendo en las casas de abuelos una despensa segura”.
El presidente de la institución que atiende a más de 1200 adultos mayores diariamente, manifestó que los robos se suman a la difícil situación del enorme déficit en la partida de presupuesto alimentario, debido a la deuda de 11 millones de bolívares que mantiene el Gobierno nacional con el Ejecutivo regional. “Cada pollo, cada legumbre, cada pasta que puedan llevarse es un enorme peso presupuestario, pues nos tenemos más recursos”, apuntó.
En ese sentido, Cabezas pidió a las autoridades mayor vigilancia para las casas de abuelos. “No es posible que se les quite la comida a los abuelos que acuden a estas casas, ellos dependen casi en exclusividad de la alimentación que les damos. Que nos roben dos semanas de comida es sumamente grave porque no tenemos cómo reponerla”.
Asimismo, Cabezas hizo un llamado a la empresa privada para que apadrine algunas de las Casas de Abuelos en el tema de alimentación. Recordó que la inflación se comió todo el presupuesto del año y aún falta por cumplirse el último cuatrimestre del 2016.