El manager que cuenta con 69 años de edad, es un ejemplo para las nuevas promesas deportivas por su disciplina y perseverancia. Posee unas excelentes técnicas de bateo
Disciplina, constancia y obediencia son los valores que durante más de 50 años ha inculcado el manager Ruperto Rivas a los niños, jóvenes y adultos ocumareños, que comparten su pasión por el béisbol.
Desde las gradas del estadio Efrén Rodríguez de Corocito, en el municipio Lander, este pelotero de 69 años de edad, rememoró y contó sus proezas dentro del campo de béisbol. “Desde muy pequeño me gustaba mucho jugar a la pelota y fue en el año 1966, cuando formé un equipo llamado Los Bucaneros, donde entrenábamos en un campito en Cotiza.
Para esa ocasión, sólo realizábamos juegos amistosos, luego me fui a Guarenas y cuando me vine a vivir a Ocumare, entrené a un grupo de niños en un equipo que llamamos Los Loritos del 23 de Enero”, indicó.
Rivas destacó, que con mucho esfuerzo y pocos recursos pasaba toda una noche pintando a mano las franelas de los jugadores. Asimismo, realizaba las prácticas en los terrenos baldíos de Aragüita II, Colonia Mendoza y Piloncito.
“Siempre les enseñé a mis muchachos las técnicas que se utilizan en el béisbol profesional; las señas, las formas de tomar el bate, el picheo y lo más importante, ganarse un puesto en el terreno, a través del respeto, obediencia y buenas calificaciones. Sí algún muchacho me decía una mala palabra, lo mandaba a darle dos vueltas al estadio”, aseveró.
“La Rupertada”…
Entre las hazañas de este entrenador destaca que en la final de un campeonato entre Loritos del 23 de Enero y Fábrica Nacional de Cemento, en 1984 se le atribuye de inventar la jugada de dar un boleto con tres jugadores en base.
“Tenía tres hombres en base y un solo out. Yo le hice señas al pícher para que se las pusiera todas malas, ya que era mejor anotar una sola carrera y no las cuatro. Gracias a eso le dimos un giro al juego y obtuvimos la victoria. Nunca nadie había hecho algo así. Tan importante fue esta hazaña que llegó hasta Estados Unidos y recibió el nombre de la ‘Rupertada’”, aseguró.
Alexis Paredes, sobrino del pelotero, señaló que éste ha sido la bugía deportiva de la familia y que a pesar de su avanzada edad, continúa dirigiendo el equipo Los Volcanes, en la categoría máster.
“Gracias al apoyo de mi tío, Wolfgang Zambrano, José Gregorio Olivares y mi persona logramos ser parte de Los Criollitos de Venezuela, donde nos destacamos y cuando cometíamos un error, él desde la tribuna, nos corregía”, señaló Paredes.
“En Ocumare hay talento”…
Ruperto Rivas, reconoció que en Ocumare del Tuy, existen muchos jóvenes con talento deportivo, que pueden llegar a las grandes ligas “Mi mensaje a la nuevas generaciones es que tengan constancia y disciplina, porque el deporte los aleja de la mala vida”, puntualizó.
MIP-TUY Agencia/Hernán Romero
hernan-estudios@hotmail.com