El utility criollo conectó 113 hits para promedio de .278, con 16 cuadrangulares y 84 carreras impulsadas
Mario Lissón regresó en gran forma a la Liga Mexicana de Beisbol con los Saraperos de Saltillo, luego que en 2013 ya había sumado su primera experiencia en este circuito con los Guerreros de Oaxaca y Petroleros de Minatitlán.
El utility disputó 111 juegos en los que promedió .278 de average, tras conectar 113 hits en 407 turnos al bate, impulsó 84 carreras y anotó en 68 ocasiones, recibió 74 boletos y de sus 113 hits, 47 fueron extra bases (16 jonrones).
Lissón fue una bujía ofensiva para los Saraperos, debido a que lideró a su conjunto en dobles (30), impulsadas (84) y en boletos recibidos (74); asimismo, quedó segundo en anotadas (68) y en cuadrangulares conectados (16).
El caraqueño, de 32 años de edad, aumentó nueve puntos su promedio respecto al año pasado (.269), cuando jugó en las filiales de los Nacionales de Washington, y sacudió 10 cuadrangulares más que en 2015. Además, el 2016 fue su segunda mejor campaña en Ligas Menores en carreras anotadas, marca que superó sólo en el 2007 cuando anotó en 72 ocasiones.
Lissón también impuso nuevo tope en cuanto a impulsadas se refiere, dejando atrás las 73 del 2006.