Daniel Rivillo, Josmar Zambrano, Luis Ruiz y Sandro Notaroberto vivieron «un mal rato». Los retuvieron por 30 minutos en una alcabala de la Guardia Nacional, los insultaron, a unos los patearon y a otro le partieron la boca. Los cuatro jugadores de fútbol del equipo Zulia FC denunciaron que los obligaron a detenerse «sin razón aparente».
El defensa Daniel Rivillo explicó a La Verdad que regresaban, a las 9.40 de la mañana de ayer, de entrenar. Por la avenida Universidad, los militares le exigieron en una alcabala que se detuviera. «Nos identificamos como atletas, les mostramos las credenciales del club, pero no les importó».
Los muchachos trataron de mediar con los oficiales, pero resultó en vano, presuntamente los insultaron y les faltaron el respeto. «Nos decían groserías, un abuso fue lo que vivimos».
Notaroberto intentó explicarles que solo eran jugadores y un oficial se lo impidió golpeándolo en el rostro. «El golpe me partió el labio y empecé a sangrar, pero estoy bien», explicó el muchacho.
Uno de ellos logró comunicarse con sus compañeros. «Llegaron tres carros con el resto del equipo y nuestros entrenadores. En ese momento se calmaron». Los policías luego del inconveniente se disculparon al verificar que pertenecían al club y los dejaron ir.
Nos agredieron sin explicación, resultamos insultados y golpeados por parte de los oficiales, luego solo se disculparon como si nada hubiera pasado» Daniel Rivillo, Defensa del Zulia.