El camarero venezolano Yangervis Solarte, quien pudiera haber finalizado su accionar en la presente temporada (por un problema familiar), es un bate fundamental en la alineación de los Padres de San Diego
Batear nunca ha sido un problema para al ambidextro Yangervis Solarte, de los Padres de San Diego, pero en 2016 el tercera base ha rebasado enormes fronteras de manera muy positiva como un productor de carreras desde el medio del lineup del dirigente Andy Green.
Alineado fundamentalmente como primero o segundo en el orden en la temporada de 2015, Solarte destaca en la actual contienda como tercero o cuarto en la mayoría de los juegos de los Monjes, al punto de que Green considera que pudiera ser un artillero productivo aun cuando integrase un plantel destinado a las posiciones de vanguardia.
De no ser por el fantasma de una lesión, una distensión en la corva derecha que le hizo perderse 38 juegos, Solarte bien pudo haber sido uno de los principales remolcadores de carrera de la Liga Nacional en la temporada en curso. Pese a consumir alrededor de unos 150 turnos menos con respecto al año pasado, va en camino a superar considerablemente sus topes personales en jonrones, remolcadas y promedio de bateo.
“Lo necesitábamos tanto, que hubo un momento en el que le dijimos que solamente corriera al 70 % de su velocidad y que no era necesario que volase hacia la primera base”, expresó Green. “Nos urgía mucho la presencia de su bate en la alineación”.
“Todo el año le ha tirado bien a la bola”, elogió Green. “Si hubiera jugado toda la temporada llevaría un paso de pegar de 25 a 30 cuadrangulares. Ha bateado cerca de .300, ha conectado la bola por todos los rincones del parque y ha sido un ambidextro productivo en el centro de nuestro lineup. Ha sido el ancla de nuestra ofensiva”.
Capaz de irse para la calle en 14 ocasiones en 152 juegos y 526 turnos en 2015, Solarte superó su tope de bambinazos en apenas sus primeros 91 encuentros de este año. Con hombres en posición anotadora, su promedio de bateo frisa casi en los .320.
“Yo no creo que de ninguna manera sería un bateador para la parte de abajo de una alineación”, enfatizó Green. “Si usted habla de un equipo de campeonato tal vez sería un quinto o sexto del mismo, en vez de un tercero o cuarto. Hay muchos otros equipos a los cuales les encantaría contar con él en el centro de su alineación”.
A Solarte, pelotero de 29 años de edad y nativo de Valencia, le gustaría haber consumido muchos más turnos en 2016, pero está feliz por la forma como se ha desarrollado la temporada en los momentos en los que ha estado saludable.
“Estoy muy contento con la oportunidad que me han brindado”, agradeció Solarte, debutante en las Grandes Ligas con los Yankees de Nueva York en abril de 2014. “Como todo, trabajando duro todas las cosas se dan. Hay que tratar de echar el resto en lo que queda de la temporada. Ahora hay más talento, tenemos más venezolanos, que es importante, porque uno tiene más apoyo”.
Dotado con la habilidad para custodiar varias posiciones tanto en el cuadro como en los jardines, Solarte se siente como pez en el agua defendiendo primordialmente la esquina caliente.
“Que me brinden la oportunidad es sumamente importante para mí, para mi carrera”, puntualizó Solarte. “Así demuestro lo que puedo hacer en el terreno. Uno viene al estadio más confiado, más tranquilo con respecto al beisbol, y agradecido con Dios”.
De su “graduación” al centro de la alineación de un equipo de las Grandes Ligas, rol usualmente desempeñado por el mejor bateador de una novena o el mejor impulsador de la misma, Solarte se siente satisfecho por la confianza que le ha dado Green y considera que todo es cuestión de acostumbrarse a nuevos roles.
“Durante todo el año, cuando aún estaban aquí Matt Kemp y Melvin Upton Jr., ya me tenían de cuarto bate y ahora que se fueron estoy alternando entre tercero y cuarto”, reveló Solarte. “Son cosas de aprendizaje también, algo nuevo para mí”.
“He podido afrontar todas las situaciones, no es tanto lo difícil”, simplificó el antesalista venezolano. “Siempre vas a tener mucha gente en base en posición anotadora y eso es la parte clave en lo que tienes que hacer. Necesitas estar más paciente y los pitcheos que te hacen no son los mismos. Gracias a Dios, todo ha salido bien”.
A lo mejor algún observador imparcial analice que un pelotero pudiera verse impactado física y emocionalmente por un cambio tan drástico, pero Solarte tiene un ángulo diferente de ver esas cosas.
“Uno nunca se imagina nada, solamente sale al terreno a jugar”, filosofó el pelotero que en Venezuela promedia .294, con 79 carreras impulsadas en 678 turnos en seis temporadas con los Tigres de Aragua, antes de que fuera canjeado el pasado mes de abril a las Águilas del Zulia. “Lo que sí uno desea es jugar todos los días para poder demostrar lo que puedes hacer”.
“Que seas tercero o cuarto bate, ya no es decisión de nosotros, sino de los mánagers”, destacó Solarte. “Ya ha pasado y estamos aquí en el presente, aprovechando las oportunidades”.
Quiere jugar en casa
Jugar en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional sería algo que dependa de algunas circunstancias y también le encantaría defender los colores de su país en el Clásico Mundial.
“En este momento sí quisiera jugar en el invierno, pero por situaciones familiares y todo ese tipo de cosas tengo que pensarlo muy bien”, comunicó el baluarte de los Padres. “Una cosa que me afectó un poquito fue la lesión que tuve muy delicada en la pierna. Desde que regresé he estado lidiando con eso. Si me llaman estaría encantado de representar a mi país (en el Clásico)”.
El dato
Yangervis Solarte fue integrante de un momento histórico, al constituirse en uno de cinco venezolanos de la alineación abridora de los Padres para un juego en San Francisco.
“Eso (jugar con varios venezolanos) es algo bueno”, recalcó Solarte. “Todo el tiempo vienes (al parque) y tienes con quién hablar y jugar. Sentimos que estamos en el país de nosotros. Es algo especial”.
Un problema familiar
El tercera base de los Padres, Yangervis Solarte, se encuentra en la Florida lidiando con un asunto familiar. El equipo confía en que el venezolano volverá al terreno de juego esta temporada, pero su ausencia podría ser bastante larga.
Solarte lleva promedio de .284 con porcentaje de embasarse de .339 y slugging de .472 en 101 partidos por la novena de San Diego esta temporada.
«Ha estado lidiando con problemas de familia todo el año», dijo el mánager de los Padres, Andy Green, acerca de Solarte. «Dado por lo que está pasando su familia, está en nuestros pensamientos y en nuestras oraciones. Está lidiando con cosas que son más importantes que el beisbol ahora mismo».
Manolo Hernández Douen
lasmayores.com