Los conductores decidieron acudir a las mesas técnicas y conseguir acuerdos que serían remitidos al presidente Nicolás Maduro. Sin embargo, si para el 30 de septiembre se mantiene la situación actual, no titubearán en llamar a paro nacional
Luego que los diferentes gremios del transporte público de Caracas paralizaran sus actividades el pasado miércoles y estacionaran más de mil unidades en la avenida Francisco de Miranda para exigir al Gobierno Nacional la autorización para el aumento del pasaje mínimo urbano a 60 bolívares, el conflicto entró en una tregua hasta la próxima semana, debido a que los conductores aceptaron rehabilitar seis mesas de trabajo para discutir el tema.
Los líderes de varias lineas de transporte se trasladaron hasta el Ministerio de Transporte y Obras Públicas para hacerle entrega de un documento al vicepresidente de la República Aristóbulo Istúriz y al ministro Ricardo Molina, en el cual fueron reflejados todos los convenios que se acordaron durante las mesas de trabajo. Allí se encuentra aprobado el aumento del pasaje a Bs. 60.
El presidente de la Federación Nacional de Transporte de Venezuela, Erick Zuleta, informó que la reunión que sostuvieron el miércoles con el vicepresidente de la República fue muy cordial y en la misma se resolvió reestructurar las mesas de trabajo para instalar 6 en total, para que el próximo miércoles se concluya con una decisión final sobre el tema. «Se planteó la discusión sobre la tarifa, la seguridad, los insumos y repuestos, la flota, el financiamiento, la formación y la seguridad social. Las mesas de trabajo serán reestructuradas a partir de este viernes, y a las miamas irán todos los representantes de todos los gremios», dijo.
«El jueves de la semana que viene se llevará al Palacio de Miraflores un documento con las decisiones tomadas y Aristóbulo Istúriz se comprometió que para el viernes 30 de septiembre, el presidente Nicolás Maduro se pronunciará con respecto a cuáles serán las medidas que va a tomar en beneficio del pueblo y de los transportistas», añadió Zuleta.
El representante de los transportistas recordó que la demanda del sector es aumentar el pasaje mínimo a 100 bolívares, aunque estima los costos reales en Bs. 300.
Zuleta acusó al ministro de Transporte y Obras Públicas, Ricardo Molina, de tener su despacho paralizado y realizar unas mesas de trabajo que no llegan a nada.
Enfatizó que la Constitución es clara sobre las competencias para fijar las tarifas de transporte urbanas, que deben ser autorizadas por los alcaldes.
El vocero denunció que Molina no se pronuncia sobre las tarifas que le corresponden, que son las interurbanas, y acotó que ya los precios han sido aumentados en varias ciudades del país como Barquisimeto, Maracaibo y Acarigua.
Finalmente resaltó que los transportistas se sienten burlados y que existe mucha desesperación en su gremio, al tiempo que apuntó que la tarifa del pasaje en cualquier parte del mundo cuesta 1,50 dólares, muy por encima de lo que se cobra en Venezuela. Negó que en algún momento el vicepresidente Istúriz amenazara a los transportistas con la expropiación de las unidades.
