El 2 de octubre es para celebrar las bondades de la no violencia. Se conmemora el nacimiento de Mahatma Gandhi, padre de la Independencia de la India y pionero de la no violencia. “Existen muchas causas por las cuales estoy dispuesto a morir, pero ninguna por la cual esté dispuesto a matar”, escribió en su autobiografía (1927).
Gandhi nos enseñó con su ejemplo que: a) la “búsqueda firme de la Verdad”, idea que contrapone a la concepción occidental de “posesión” de la verdad, no puede darse por cualquier medio; b) que debe estar regida por la ahimsa o no-violencia; y c) que esta última tiene que ver con las actitudes personales, ya que el cambio que soñamos para el mundo debemos forjarlo primero en nosotros mismos.
Su filosofía contempla, sin embargo, un segundo pilar igualmente importante: la satyagraha o resistencia pasiva, según la cual, en algunas situaciones de injusticia, es lícito acudir a formas de presión no violentas como la no-cooperación, la desobediencia civil, el boicot, la huelga y el ayuno.
De acuerdo con la resolución A/RES/61/271 de la ONU, este día es una ocasión para “diseminar su mensaje”. Seamos el cambio que deseamos ver.
Maria Gabriela Mata Carnevalli