La voluntad de cambio del pueblo venezolano es más poderosa que cualquier trampa leguleya o malintencionada maniobra tecnológica
Si. Así es. Hoy domingo 16 de octubre estamos apenas a diez días del inicio de la jornada del 26, 27 y 28 del mes en curso. Días cruciales para los venezolanos: la jornada de recolección de manifestaciones de voluntad para el RR no será simplemente el cumplimiento de un acto administrativo. En las presentes condiciones, lo que ocurrirá durante esos tres días tendrá un valor mucho más alto: será un pueblo obligando a un gobierno a cumplir con la Constitución y con la Ley.
“Tramposería sale”
Así decíamos cuando éramos niños, si en medio de algún juego infantil el niño que rompía las reglas terminaba de todas maneras perdiendo: “tramposería sale”, coreábamos, para resaltar cómo la mala fe, el irrespeto a la legalidad y el abuso siempre se devolvía como un bumerán, castigando al perpetrador.
Pues bien, eso es lo que está ocurriendo de cara a las venideras jornadas del 26, 27 y 28 de octubre: las cuatro rectoras “maduristas” del Consejo Nacional Electoral violaron la Constitución, la Ley y su propio Reglamento al establecer una plataforma tecnológica precaria, insuficiente, mezquina, incapaz de atender a la totalidad de la población convocada al proceso de recolección de manifestaciones de voluntad para convocar al Referendo Revocatorio. ¿Cuál es esa población? ¿Será la que defina el capricho de las rectoras maduristas, o el interés electoral de la oposición? ¡No! Esa población está definida por la letra de la Constitución Nacional, que en su articulo 72 reza: “Transcurrida la mitad del período para el cual fue elegido el funcionario o funcionaria, un número no menor del veinte por ciento de los electores o electoras inscritos en la correspondiente circunscripción podrá solicitar la convocatoria de un referendo para revocar su mandato”. En el caso del Revocatorio contra quien ocupa la presidencia de la república, la circunscripción que corresponde es todo el país. Los electores inscritos en esta circunscripción son 19 millones y medio. Y la norma del CNE establece para estos casos una máquina para cada mil electores. Debiera estar prevista entonces, de acuerdo a la Constitución y a las normas internas del CNE una plataforma de al menos 19.500 máquinas captahuellas distribuidas en por lo menos 7.500 centros. En lugar de ello, las rectoras maduristas del CNE decidieron que solo se activaran poco mas de 5 mil máquinas en apenas 1.356 centros. Creyeron las rectoras maduristas y sus jefes partidistas que tal limitación lograría desestimular la participación popular, pero…
La fuerza es la unión
…Pero la voluntad de cambio del pueblo venezolano es más poderosa que cualquier trampa leguleya o malintencionada maniobra tecnológica. Todas las encuestas (las encargadas por la Unidad, las mandadas a hacer por el gobierno y las realizadas en forma independiente) revelan que la cantidad de venezolanos dispuestos a participar en las jornadas del 26, 27 y 28 de octubre se ubica entre los 12 y los 14 millones de personas, dependiendo de la encuestadora y de la metodología utilizada. Como no es lo mismo “querer participar” que efectivamente hacerlo, sobre la base de estas encuestas todos los expertos coinciden en señalar que el número de ciudadanos que efectivamente participarán poniendo su huella para exigir el RR puede ubicarse entre los 9 y los 11 millones. Al contrastar esa cantidad de gente decidida a participar con la exigua capacidad de la plataforma tecnológica dispuesta por el CNE, es posible entender el terror actual de la cúpula corrupta frente a lo que se avecina: ellos saben que el 26, 27 y 28 serán tres días en los cuales millones de venezolanos saldrán a las calles a revocar al gobierno. Millones lograrán dejar sus huellas digitales en las máquinas captahuellas, millones estarán en las colas, presionando pacíficamente para ejercer su derecho constitucional, y millones estarán en la calle, asistiendo a los que estén en las colas, todos exigiendo democracia, libertad y la salida del gobierno más ineficiente y corrupto de nuestra historia. Ese será el resultado de la “viveza” madurista de poner menos máquinas de las necesarias. “Tramposería sale”…
Pacíficos y decididos
Esto es lo que el pueblo venezolano ha a hacer dentro de diez días exactos. No vamos a “pedir una fecha” ni a “cumplir con un requisito administrativo”. Vamos a exigirle al régimen que acate la Constitución, que acate la voz del soberano (fuente primordial de toda legitimidad) y que acate el 20 % nacional, único requisito establecido por el artículo 72 de la Carta Magna para proceder a realizar el Revocatorio. Y lo vamos a hacer masivamente, pacíficamente, contundentemente. Y el régimen no tendrá sino dos caminos: o acata la voz del pueblo, y se somete a un referendo que obviamente perderá, o intenta alzarse contra la voz del pueblo, y de esa manera lo perderá todo.
Tenemos diez días entonces para dar los toques finales de lo que será una amplia y contundente victoria popular: si la jornada del 26, 27 y 28 alcanza estas dimensiones, será un tsunami electoral, será de hecho el propio Revocatorio, porque de sus efectos políticos el régimen no se podrá recuperar. Ese es el reto. ¡Pa’lante!
«Tenemos diez días entonces para dar los toques finales de lo que será una amplia y contundente victoria popular: si la jornada del 26, 27 y 28 alcanza estas dimensiones, será un tsunami electoral, será de hecho el propio Revocatorio…»
Jesus Torrealba