Oficiales adscritos al Sebin, Dgcim y Policía Nacional Bolivariana fueron asesinados en el oeste de la capital y en San Francisco de Yare
En hechos aislados ocurridos en la ciudad capital y el estado Miranda, fueron ultimados tres funcionarios de seguridad del Estado. Los crímenes ocurrieron en menos de 24 horas.
En un establecimiento ubicado en la avenida Victoria, de nombre Trattoria de Nico, fue asesinado de un tiro en la cabeza, el efectivo del Sebin, Miguel Yodran Oviedo, de 27 años de edad.
Oviedo llegó al local con otro compañero del Sebin para celebrar que había entregado su tesis académica. La seguridad del negocio estaba a cargo de un sujeto identificado como Aaron Rodríguez, presunto integrante del colectivo Fundación Boina Roja.
El hombre, que portaba un carnet a nombre de esa agrupación, se percató que los clientes estaban armados y los interceptó pensando que se trataba de un intento de robo.
Hubo un intercambio de palabras, seguido de disparos de ambos bandos. Oviedo recibió un disparo en la cabeza y Rodríguez también resultó herido muriendo ambos. Del caso surgió otra versión que indica que el miembro del colectivo intentó robarle el arma al funcionario cuando este salió a la calle para atender una llamada.
Al oeste de Caracas, ocurrió otro asesinato que cobró la vida de Abrahán Castellanos, funcionario adscrito a la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim).
El crimen ocurrió en el bloque 1 de la parroquia 23 de Enero. La víctima fue sorprendida por sujetos que viajaban en un Chery Orinoco de color blanco. Castellanos los enfrentó y logró herir a uno de los antisociales.
Mientras tanto, en el estado Miranda, fue ultimado Oswaldo Antonio Herrada, oficial de la Policía Nacional Bolivariana. Lo encontraron en el sector Ernesto Báez de San Francisco de Yare con un tiro en la cabeza. La víctima pertenecía a la quinta promoción de la UNES. Estaba destacado en el servicio Ven-911 con sede en La California.
Cayó El Popeye
Un sujeto identificado como Andri Jesús Alexánder Sequera Márquez (24), alias «El Popeye», resultó muerto tras alzar armas contra los funcionarios de la Dirección Antiextorsión y Secuestro de la Policía Nacional Bolivariana, en la parte alta de la parroquia La Vega, municipio Libertador de Caracas.
El operativo en el cual resultó muerto el delincuente se llevó a cabo en horas de la madrugada de ese sábado, cuando comisiones policiales realizaban labores de búsqueda y captura por la zona antes mencionada, y fueron sorprendidos por «El Popeye», quien sin mediar palabras desenfundó su arma de fuego, tipo revolver, calibre 357 mm, y disparó contra la comisión. En el enfrentamiento resulto herido el sujeto.
El herido fue trasladado por las autoridades hasta el hospital Miguel Pérez Carreño, donde falleció poco después de su ingreso.
Las investigaciones arrojaron que éste antisocial líderizaba una organización criminal dedicada al secuestro y extorsión de comerciantes que hacen vida en la Parroquia La Vega y el Mercado Mayor de Coche, además de mantener en zozobra a la comunidad.
Se pudo conocer que alias «El Popeye» poseía siete solicitudes, por diferentes delitos, entre ellos dos por homicidio intencional calificado.