De acuerdo a las informaciones extraoficiales obtenidas en el sector del turismo privado, como hoteles, agencias de viajes, líneas aéreas y otros servicios turísticos, la temporada alta de la vacaciones de diciembre se está moviendo con mucha lentitud, y hasta desalentadora, ya que las reservaciones en los hoteles ubicados en destinos turísticos como Margarita y Mérida no llegan a la fecha a un 12 %. Lo mismo está sucediendo con las líneas aéreas nacionales, que, según datos obtenidos, las reservaciones para vuelos en esta temporada no llegan al 50 %. Este desalentador ambiente se debe a la situación económica por la que atraviesa la nación, sumado al desabastecimiento y la especulación en los productos alimenticios y de la higiene personal y en los servicios, así como por la inseguridad que se vive en las carreteras nacionales. Por lo tanto, las luces decembrinas que inspiran hacer los planes vacacionales no se han encendido a la fecha, por lo que hasta ahora no hay espíritu de navidad, no se ha sentido y no ha animado a los viajeros a disfrutar los días de navidad y año nuevo y a otros a salir de viaje para reunirse con la familia, porque el reencuentro familiar implicará llevar comida y una mochila de real. Así es, pues, que los viajes de esta temporada decembrina, están como se dice en criollo, ¡en pico e’ zamuro!
Levy Benshimol