Según una versión familiar, en el callejón sanaría del barrio Unión había un tiroteo y un proyectil ingresó por la ventana alcanzando a Keiner Castillo Rivero en el cráneo. Otra tesis señala que el disparo provino dentro de la misma casa
La policía científica investiga las circunstancias en las cuales resultó baleado en la cabeza el adolescente Keiner Castillo Rivero (14), cuando se encontraba en la residencia de un familiar en el callejón Sanabria, primer tanque del barrio Unión, Petare, el martes a las 2 de la tarde.
Según una versión familiar, afuera había un tiroteo y un proyectil ingresó por la ventana alcanzando a Keiner en la cabeza. Otra tesis señala que el disparo provino dentro de la misma casa.
Keiner se encontraba acompañado por un primo de 15 años. Recibió un tiro en la frente, fue trasladado al hospital Domingo Luciani, de El Llanito, donde falleció tres horas más tarde.
Un pariente denunció que al joven no lo atendieron al momento de ingresar, estuvo tirado en el piso del hospital, agonizando, hasta que un familiar habló con una amiga que es enfermera en el centro y lo colocaron en una camilla. Expiró tras sufrir un paro respiratorio.
Fue uno de los 15 cadáveres llevados a la morgue de martes a miércoles y van 91 de 7 días del mes de diciembre.
Dos hombres no identificados fueron ultimados por grupos armados en el pasillo de la planta baja en el bloque 47, sector El Mirador del 23 de Enero.
A uno lo conocían como “el bemba”, residenciado en El Pueblito, y otro era vecino del bloque 36. La fuente reveló que les desfiguraron los rostros con múltiples disparos.