La presencia de zamuros fue determinante para establecer dónde estaban enterrados los cuerpos de ambos hombres
Seis personas habrían participado en el asesinato del funcionario de la Policía Municipal de Guaicaipuro Jhorman Hawer Machado Matos, de 25 años de edad, y de su suegro, el mecánico Carlos Moya, de 47 años de edad, hecho ocurrido la semana pasada en el barrio Moscú de Guatire.
El caso fue resuelto en tiempo récord por funcionarios adscritos a la subdelegación de Guarenas de la policía científica, quienes siguieron la pista de las llamadas telefónicas realizadas con los equipos de las víctimas a los pocos días de haber sido asesinadas, de esa manera lograron triangular la localización de los teléfonos y detener a uno de los implicados quien condujo a los oficiales hasta un lugar boscoso donde fueron sepultados los cuerpos.
Machado y Moya salieron del kilómetro 5 de El Junquito el primero de diciembre, se dirigían hacia Guatire para comprar unos repuestos para vehículos, al parecer se trataba de una emboscada y cuando llegaron fueron interceptados por varios sujetos, quienes los despojaron de sus pertenencias y los asesinaron.
Los cuerpos permanecieron ocultos hasta este miércoles, cuando se realizó el operativo que culminó con la detención de Darwin Eduardo Rosas (28) y la localización, gracias a la presencia de zamuros, de la fosa común en la que fueron sepultados ambos hombres.
Efectivos del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas adelantan las pesquisas para dar con el paradero de los demás integrantes de la banda que cometió el doble crimen.
