El obispo monseñor Gustavo García Naranjo, hizo un llamado especial a los jóvenes que asistieron a la ceremonia en la iglesia Nuestra Señora de Coromoto en Trapichito: “No hay cosa más bella que consagrar la vida a Dios cuando el Señor así lo quiere”.
“El ministerio del diaconado permanente forma parte del sacramento del orden sacerdotal en el que la persona consagrada está llamada a vivir la triple funcionalidad por medio del Espíritu Santo: enseñar, santificar y regir. También participa en la fraternidad sacerdotal, y en la edificación del Cuerpo de Cristo, bajo la autoridad del obispo”.
Con este mensaje, monseñor Gustavo García Naranjo, motivó a los cuatro nuevos diáconos permanentes consagrados en dos ceremonias distintas, y que ahora forman parte del clero en la Diócesis de Guarenas para afianzar el trabajo de evangelización que esta iglesia particular.
La primera ceremonia fue el 4 de diciembre, en la parroquia “Nuestra Señora de la Encarnación” de Caucagua, donde luego de un proceso de formación, fueron ordenados los educadores jubilados Egdy José Rodríguez y Rubén Serrano, además de Jesús Sánchez, quien es técnico en telecomunicaciones. Estos nuevos diáconos trabajarán en comunidades de Barlovento.
La cuarta ordenación diaconal fue este 10 de diciembre en la parroquia “Nuestra Señora de Coromoto” de Trapichito, y correspondió a Alfredo Rojas Díaz quien ha cumplido su trabajo evangelizador en la vicaría “María Auxiliadora” de Ciudad Casarapa.
El prelado enfatizó las responsabilidades que han de cumplir estos ministros de Dios que también son hombres casados, y como en el caso de Alfredo Rojas, asistió a la ceremonia con su esposa Carolina Ron y sus hijos Eduardo José, Diana Valentina y Aarón Elías.
Citó el oficio de santificar. “Es decir, que el diácono se desarrolla por medio de la oración, sobre todo en la administración del sacramento del bautismo, en la distribución de la Eucaristía, en la asistencia y bendición de los matrimonio, en presidir el rito de los funerales y de la sepultura y en la administración de los sacramentales”.
Respecto a oficio de regir, detalló que esta función “se manifiesta particularmente en el servicio, pues se ejerce de forma especial en las obras de caridad y de asistencia, así como en la animación de las comunidades a vivir la caridad”.
20 años de erigida
La Diócesis de Guarenas fue erigida como tal el 30 de noviembre de 1996 por el Papa Juan Pablo II, luego de desprender esta porción del pueblo de Dios de la Diócesis de Los Teques. Fue puesta bajo la autoridad de monseñor Gustavo García Naranjo como su primer obispo. Poco a poco ha venido consolidando su propio clero y seminaristas.