Artículos escritos para La Voz por los profesores de la Escuela de Estudios Internacionales de la Universidad Central de Venezuela. La responsabilidad de las opiniones emitidas en sus artículos y Notas Internacionales es de los autores y no comprometen a la institución.
Retos de China
La expansión china ha sido resultado de una complejidad de procesos, entre los cuales destaca la estrategia de expansión e inserción económica internacional
Félix Gerardo Arellano
Desde que Deng Xiaoping y la cúpula del partido comunista deciden la apertura económica al capital y al mercado, el ascenso de China ha sido vertiginoso, llegando en los actuales momentos a convertirse en la segunda gran potencia mundial en el plano económico comercial; empero; el efecto Trump pareciera anunciar tiempos de gran incertidumbre, al punto que incluso se oyen voces de guerras.
La expansión china ha sido resultado de una complejidad de procesos, entre los cuales destaca la estrategia de expansión e inserción económica internacional, que con gran habilidad y prudencia les ha permitido extenderse de forma planetaria. Uno de los hitos determinantes en esa estrategia fue su incorporación en la Organización Mundial del Comercio (OMC), lo que ha facilitado su adaptación a las reglas y prácticas del comercio mundial. Adicionalmente ha desarrollado diversas modalidades de inserción que incluye la utilización de los acuerdos comerciales, que van desmontando gravámenes y barreras de todo orden.
Otro elemento fundamental de la estrategia tiene que ver con la apertura a las inversiones. Tal apertura, sumada a la competitividad por bajos costos laborales y la seguridad jurídica de un rígido gobierno centralista y autoritario totalmente decidido a facilitar y fortalecer el mercado, le convirtió en uno de los polos de atracción de capitales y nuevas tecnologías. Muchas de las grandes corporaciones del mundo abrían filiales en el mercado chino o lo convertían en el epicentro de sus cadenas de producción.
La transformación de la china comunista al mercado permitió superar años de hambrunas de los tiempos de Mao y demostró al mundo el absoluto fracaso del comunismo para la generación de bienestar social. Con el tiempo, Vietnam se ha sumado al modelo chino y todo indica que es el único camino de sobrevivencia que le queda a la dictadura cubana.
Pero la tranquilidad y estabilidad del crecimiento económico chino se enfrenta en los actuales momentos con varios desafíos. Por una parte, la retórica de Donald Trump muy agresiva contra China, lo que algunos visualizan como la posibilidad de una guerra comercial. Para el confuso nacionalismo económico de Trump, resulta inaceptable que los inversionistas, actuando globalmente, inviertan en otros países y los está amenazando con potenciales sanciones.
A las amenazas comerciales se deben sumar otras más graves, de carácter militar, ante el expansionismo territorial de China, entre otros, en el sur del mar de China, con la construcción de unos islotes artificiales que rechazan tanto Trump como todos los países ribereños. También en el plano interno se aprecia inestabilidad que puede afectar al proyecto chino. Es el caso, entre otros, de la pobreza en las zonas rurales, la creciente corrupción en el partido, el totalitarismo que limita la acción humana y enfrenta grupos étnicos o religiosos como el genocidio cultural del budismo en el Tíbet. Como se puede apreciar, es un año de retos para China.
TEMA INTERNACIONAL / Pie mojado, pie seco
Leonel Alfonso Ferrer
La política pública en materia de asilo de los Estados Unidos de América desde 1995 para los refugiados cubanos ha llegado a su fin. Esa política por la cual la administración americana establecía un criterio para otorgar refugio era un memorando a la Ley de Ajuste Cubano de 1966.
Los llamados pies secos, «dry foot», eran aquellos que lograban llegar a suelo estadounidense y podían solicitar la residencia permanente al año y un día contados desde el momento de su llegada al país; en cambio, aquellos cubanos que eran detectados por la Guardia Costera americana en medio del mar, los pies mojados o «wet foot», eran detenidos y devueltos a la isla de Cuba.
Ahora, desde el 12 de enero de 2017, los cubanos deben tener una visa para ingresar a Estados Unidos. Si no la tienen y temen ser perseguidos, podrán solicitar asilo, como el resto de los inmigrantes, y probar que se teme ser objeto de represalias por una de cinco razones específicas señaladas en la ley.