El nuevo secretario de Defensa, James Mattis, llegó el jueves a Corea del Sur y continuó este viernes en Japón una gira
La administración del presidente Donald Trump impuso el viernes nuevas sanciones a Irán por su programa de misiles balísticos y endureció el tono con ese país, días después de una prueba que provocó la cólera de Washington.
Estas nuevas sanciones, no relacionadas con el programa nuclear de Teherán, afectan a 25 personas o entidades sospechosas de haber aportado un apoyo logístico para los misiles balísticos iraníes, señaló el departamento del Tesoro en un comunicado.
De acuerdo con las sanciones aprobadas por el Tesoro, dirigidas sobre todo contra una red de apoyo en China, las personas y entidades afectadas sufrirán el congelamiento de sus eventuales haberes en Estados Unidos y no podrán hacer transacciones con personas e instituciones estadounidenses.
– «No descartamos nada» –
Ya el jueves, al ser consultado por la prensa si consideraba la posibilidad de una acción militar contra Irán por la prueba misilística, Trump se había limitado a responder con tono ominoso: «no descartamos nada».
La elevación del tono había sido evidente esta semana cuando el consejero de Seguridad Nacional de Trump, Michael Flynn, envió a Irán una «advertencia» por la prueba con el misil.
El portavoz de la cancillería iraní, Bahram Ghasemi, consideró que la posición estadounidense se apoyaba en «observaciones sin fundamento».
Trump es un ácido critico del acuerdo impulsado por Estados Unidos y firmado por varios países occidentales con Irán a raíz de su industria nuclear, y ya ha amenazado con revisarlo.
Ese acuerdo fue el gran trofeo diplomático del predecesor demócrata de Donald Trump, Barack Obama, quien se esforzó por reducir las tensiones con Irán.
Apenas dos semanas después de haber asumido la presidencia, el gobierno de Trump envió también un mensaje duro a Corea del Norte.
Durante una visita a Corea del Sur, el nuevo secretario de Defensa, James Mattis, advirtió el viernes que un ataque nuclear de Corea del Norte contra Estados Unidos o uno de sus aliados provocaría una respuesta «eficaz y aplastante» de Washington.
El jefe del Pentágono es el primer alto funcionario de la administración Trump que realiza un viaje oficial al extranjero.
Mattis llegó el jueves a Corea del Sur y continuó este viernes en Japón una gira destinada a dar garantías del compromiso de Washington con la seguridad de sus aliados clave.
– Rusia y Crimea –
Washington también sorprendió el jueves al arremeter contra Rusia en el Consejo de Seguridad de la ONU.
En diversas oportunidades Trump se manifestó favorable a una mejora de las relaciones con Rusia, pero el tono utilizado por su embajadora ante la ONU, Nikki Haley, fue de pocos amigos.
Haley condenó «las acciones agresivas de Rusia» en Ucrania y afirmó ante el Consejo de Seguridad que se mantendrían las sanciones contra Moscú «hasta que Rusia devuelva el control de la península (de Crimea) a Ucrania».
Un millar de diplomáticos y funcionarios contestatarios firmaron un memorando interno denunciando el reciente decreto anti-inmigración firmado por Donald Trump y que hasta hoy sigue haciendo olas en las relaciones internacionales de Estados Unidos.
AFP