El papa Francisco visitó este viernes por primera vez una universidad pública, la Roma TRE, en la capital italiana, donde habló a los universitarios de la importancia de la integración de los inmigrantes y del diálogo para evitar los conflictos.
Francisco fue recibido en medio de una gran expectación, con los estudiantes agolpados a la entrada del ateneo para saludar al pontífice y hacerse selfies con él.
El ambiente era muy distinto al que rodeó al papa emérito Benedicto XVI en 2008, cuando se vio obligado a suspender su visita a la universidad estatal de La Sapienza, en Roma, tras las protestas de algunos profesores y estudiantes.
En el amplio patio de entrada a la universidad, Francisco dejó de lado el discurso que había preparado e improvisó ante las preguntas de cuatro estudiantes sobre cuestiones de actualidad, como la violencia, la inmigración o la problemática de un mundo globalizado.
Francisco se refirió a la sociedad actual, donde “los tonos se han levantado”, “donde por la calle o en casa se grita” y donde existe una “violencia verbal a la hora de expresarse”.
“Y esta violencia crece y se llega la violencia mundial” lamentó Francisco, que reiteró: “Estamos en guerra. Esta es una tercera guerra mundial a trozos”, exclamó.
Lamentó que el mundo viva en un momento en el que “nunca la política ha estado tan abajo” y que así “se pierde el sentido de la construcción social, de la convivencia social, porque la convivencia social se construye con el dialogo”.
EFE