Artículos escritos para La Voz por los profesores de la Escuela de Estudios Internacionales de la Universidad Central de Venezuela. La responsabilidad de las opiniones emitidas en sus artículos y Notas Internacionales es de los autores y no comprometen a la institución.
Via crucis fronterizo
Pretender solucionar los problemas existentes en la frontera cerrándola es una medida autoritaria y un arma de doble filo, porque ha generado situaciones conflictivas peores que aquellas que se pretendían resolver
Seny Hernández Ledezma
El tema de las relaciones bilaterales en el ámbito de la frontera entre Venezuela y Colombia se ha convertido en un vía crucis que aqueja y determina la vida de las personas de esos dos países y muestra los impactos políticos que tienen las decisiones gubernamentales que se van adoptando. Existen dependencias recíprocas entre ambos países, aunque los grandes ejecutores de la política exterior pretendan no admitirlas y se empeñen en forjar destinos independientes.
Pretender solucionar los problemas existentes en la frontera cerrándola es una medida autoritaria y un arma de doble filo, porque ha generado situaciones conflictivas peores que aquellas que se pretendían resolver y ha producido estallidos y escaladas de violencia, así como graves situaciones violatorias de los derechos humanos. Los problemas se hacen más complejos y a las circunstancias precedentes se le suman otras cada vez más difíciles de solventar.
En algunos momentos se han podido establecer acuerdos pacíficos exitosos entre las partes, proponiéndose salidas dignas que han permitido satisfacer las expectativas de los ciudadanos, como ocurrió con la apertura de la frontera colombo-venezolana durante las fiestas navideñas y de año nuevo el pasado mes de diciembre, al reactivarse el paso peatonal y mantenerse los controles indispensables para garantizar la seguridad de ambas naciones.
El mercado natural de los venezolanos es el colombiano y viceversa. Los problemas de desabastecimiento de alimentos y de medicinas que vivimos se pueden superar facilitándole a las personas el libre tránsito de un país a otro, como antes había ocurrido. Ahogar estas posibilidades a través del cierre de las fronteras es contribuir con el desabastecimiento de productos fundamentales y con el deterioro de las condiciones de vida de la población. Lo conveniente sería establecer políticas claras de cooperación, sin que un país se sienta amenazado por el otro.
Una serie de situaciones irregulares requieren ser atendidas con prontitud, como el contrabando de la gasolina, la presencia de la violencia armada y el narcotráfico, por solo citar unas pocas.
El contrabando de la gasolina venezolana en Colombia ha conducido a situaciones inhumanas, como el caso de los adolescentes pimpineros en la Guajira, quienes, buscando con desesperación ingresos familiares, llenan unos recipientes con el combustible procedente de los automóviles, utilizando sus bocas y unos tubos plásticos durante más de 10 horas diarias; recibiendo como compensación entre 3 y 4 dólares al precio del mercado negro, mientras abandonan la escuela y no dejan de sentir los efectos nocivos de las sustancias tóxicas sobre sus organismos.
Recientemente, el gobierno de Venezuela, tras la búsqueda de salidas al problema del contrabando de la gasolina, propuso el establecimiento de nuevas estaciones fronterizas de combustible, cuyas ventas se realizarían en pesos colombianos. Esta medida que aliviaría mucho los bolsillos de la población en el vecino país, produjo una reacción adversa, porque el Gobierno colombiano considera que en lugar de superar el problema del contrabando de la gasolina, lo aumenta y prefirió subsidiar la gasolina en Cúcuta y cerrar el tránsito vehicular en la frontera antes que apoyarla. La procesión continúa.
Notas internacionales
La Conferencia de Bonn
Carlos Martínez Ceruzzi
El Secretario de Estado de los EE.UU. Rex Tillerson, se encontrará en las próximas horas, con su homólogo ruso en la ciudad alemana de Bonn, en la conferencia ordinaria de Ministros de Asuntos Exteriores y Cancilleres del G-20 prevista para este año.
Aunque la sorpresiva renuncia del general Flynn como asesor de seguridad estratégica del equipo de Donald Trump ha generado críticas en los EE.UU. por la llamada conexión rusa; la visita de Rex Tillerson a Bonn sigue generando importantes expectativas.
Esta reunión no será fácil. Tampoco con los representantes del gobierno alemán. Sin embargo, es muy difícil que cambie la definición estratégica del equipo de Donald Trump, relativa a nueva política exterior de seguridad estadounidense hacia Europa y Rusia: hay que llegar a un entendimiento regional respecto a la crisis de refugiados que sufre actualmente Europa, y esto pasa por el reconocimiento del status de gran potencia de Rusia, y de su necesaria influencia tanto en Siria como en Crimea.