El gobernador de Vargas, Jorge Luis García Carneiro, aseguró este jueves que no le debe nada a sus trabajadores en pagos o retroactivos correspondientes al año 2016. Admite y reconoce que está en mora con la aplicación de los aumentos decretados por el presidente Nicolás Maduro en lo que va de 2017, así como el nuevo monto por concepto de bono alimentación, pero explica que espera que la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre), envíe los recursos correspondientes, para poder honrar estos compromisos.
Las declaraciones fueron ofrecidas por el mandatario regional en compañía del secretario de Administración de la gobernación de Vargas, Orlando Rondón, para dar respuesta a los anuncios hechos por el gremio de docentes y médicos, quienes reclaman deudas y el pago de los últimos aumentos presidenciales, así como la queja de muchos empleados regionales de haber recibido el pago de los cestaticket correspondiente al mes de marzo en 64 mil bolívares y no en 108 mil. Los trabajadores aseguran que Vargas recibió recursos extraordinarios para cumplir con esos pagos. Garcia Carneiro dice que no.
“La gobernación trabaja con un presupuesto. Los cestatickets se presupuestaron con ese monto y debemos esperar los recursos, que ya fueron solicitados a la Oficina Nacional de Presupuesto. Una vez lleguen al Tesoro regional se harán los pasos exigidos por ley para honrar los pagos. Lo mismo ocurre con los aumentos decretados por el presidente Maduro de 50 % para los empleados públicos y 50 % para los médicos”, dijo García Carneiro.
El gobernador argumentó que para cumplir con los pagos de la nómina del gobierno regional, un total de 7.500 trabajadores, requiere de un total de 10 mil millones de bolívares.
Aseguró que en el caso de los docentes y médicos se les pagó un 105% de aumento en el año 2016 y volvió a negar cualquier retroactivo pendiente.