Los numerosos mensajes de jugadores que están en la cúspide del fútbol venezolano (con el capitán Tomás Rincón a la cabeza) y algunos retirados, son el mejor testimonio de lo que Lino Alonso significa en la historia del deporte venezolano: un incansable y exitoso forjador de talento.
Alonso, oriundo de Orense con más de medio siglo en Venezuela, falleció a consecuencia de un infarto, el domingo en Bolivia, donde trabajaba como asistente en el cuerpo técnico de César Farías para el equipo The Strongest; una tarea que ya había desarrollado con el antiguo DT del equipo nacional en equipos de México y Paraguay, culminación de su paso por la división máxima que iniciara en ocho temporadas al frente del Deportivo Galicia. También dirigió en una oportunidad al Carabobo, que llevó a la Copa Suramericana
Su tarea más reconocida, sin embargo, fue en las divisiones menores. Incluyó clubes y selecciones, en un largo discurrir que apretadamente sintetizamos: Distrito Federal y Liga Menor, selecciones Sub 17 y Sub 20, incluso trabajando con Ratomir Dujkovic. Torneo de las Américas, Eliminatorias a Juegos Panamericanos, Preolímpico, selecciones sub 15, Sub 17, Sub 20 y Sub 23, Juegos Odesur y Centroamericanos. Estuvo muy cerca del Mundial Sub-20 y laboró con Farias en la Selección Sub-20. Como Dt, sus logros internacionales más importantes fueron la medalla de oro en los Centroamericanos de 1998, plata en Odesur 1996 y Bolivarianos 2005, bronce en Bolivarianos de 1998 y 2001.
AN