Unos efectivos mencionaron a la familia de ranyerson Manuel González Martínez, de 19 años, que se le había escapado el tiro mientras limpiaba el arma y otros que el fusil se le accionó al tropezarlo cuando se levantó del asiento
Franyerson Manuel González Martínez (19), fue asesinado de un disparo de fusil por la espalda cuando se encontraba detenido en un módulo de la Guardia Nacional Bolivariana en Petare.
El presunto responsable del hecho fue un efectivo castrense que se encontraba de guardia la madrugada del viernes.
Las versiones de los funcionario fue que se trató de un hecho accidental. Unos mencionaron a la familia que se le había escapado el tiro mientras limpiaba el arma y otros que el fusil se le accionó al tropezarlo cuando se levantó del asiento.
El detenido que estaba herido fue llevado por la GNB al hospital Domingo Luciani, en El Llanito. Allí trataba su abuela, Carmen González, quien es licenciada en enfermería. Lo atendieron de emergencia pero falleció a las 9:00 am.
González contó que su nieto fue apresado el 5 de diciembre de 2016 junto a otras tres personas por un presunto robo. A dos los dejaron en libertad, un adolescente y un vendedor de café. Al parecer Franyerson estaba a punto de salir libre también porque según la familia no había alguna denuncia en su contra.
Contaron que habían diferido varias veces las audiencias. Había librado una boleta de excarcelación pero el jueves cuando lo llevaron al Palacio de Justicia les dijeron que tenía error. Tenia que permanecer detenido quince días más mientras se corregía el error.
Cuando fue capturado estuvo recluido en el módulo de La Dolorita, pero luego lo llevaron al de Petare, frente al Metro. Cuando la familia intentó buscar información de lo que había sucedido, les dijeron que le dispararon al percatarse que intentaba fugarse y hasta que se había tratado de un supuesto enfrentamiento.
El joven vivía con su madre, trabajaba en una carpintería en Mariches y era el mayor de dos hermanos. El proyectil le perforó el pulmón derecho y salió por el pecho. Cuando llegó al hospital logró hablar y pidió que llamarán a su abuela.
La señora aseguró que llevará el caso hasta sus últimas consecuencia ya que a su nieto le violaron sus Derechos Humanos.
Contó que el otro detenido por el mismo caso de Franyerson no cuenta con familiares que le lleven comida y eran ellos quienes le daban alimento cuando visitaban a su pariente.