A diferencia de la carne y el pescado, el pollo era la proteína más económica, por lo cual su consumo había repuntado. Sin embargo, para muchas familias ya sus ingresos resultan limitados para adquirir este alimento.
Un kilo de pollo se encuentra en 8.500 bolívares y en pocas semanas subió 91 %. En abril estaba en 4.450 bolívares.
María Guevara, una ama de casa que se encontraba haciendo las compras en el mercado de Quinta Crespo, en Caracas, manifestó su frustración con los constantes aumentos de precio en los alimentos.
En los mercados municipales, cortes como el muslo y la pechuga sin hueso se encuentran entre los 8.000 y 12.000 bolívares respectivamente, lo que representa un aumento de más de 90 %.