Sebastian Vettel se llevó la victoria del Gran Premio de Mónaco al aprovechar una parada en boxes para adelantar a su compañero Kimi Raikkonen.
El germano mantiene el liderato y le da un duro golpe a un Hamilton que acabó séptimo. Carlos Sainz culminó un gran fin de semana terminando en sexta posición.
La carrera comenzó con susto para Carlos Sainz, que a punto estuvo de chocarse con el mexicano Sergio Pérez, pero afortunadamente salvó el golpe y pudo continuar con tranquilidad. Por delante los Ferrari comandaban la carrera con tranquilidad.
Por su parte, Lewis Hamilton ganaba posiciones poco a poco tras salir 14 en parrilla hasta que se colocó en séptimo lugar, por detrás del Toro Rosso de Sainz. Por detrás, los McLaren actuaban de manera muy distinta. Por un lado Stoffel Vandoorne mantenía el tipo rodando en décima posición mientras que Jenson Button continuaba en la cola del grupo.
Pasaban las vueltas y Kimi Raikkonen mantenía la primera plaza hasta que su compañero de equipo se la jugó en boxes. Sebastian Vettel aprovechó la parada técnica para rebasar a su compañero y pasar a liderar la carrera.
A menos de 20 vueltas para el final los aficionados del motor se llevaron un buen susto: el Sauber de Pascal Wehrlein aparecía de lado junto a las protecciones del circuito. Afortunadamente, el piloto pudo salir por su pie y la repetición nos mostró que la situación venía de un toque con Jenson Button a la salida de una curva.
El accidente propició la salida del Safety Car, que privó a los pilotos de circular con normalidad durante algunas vueltas. En cuanto el coche de seguridad se fue, Vandoorne se estrelló contra las protecciones, provocando una vez más que ninguno de los dos McLaren pudieran terminar la carrera.
En las diez vueltas restantes, por mucho empeño que le pusieron los pilotos de arriba por intentar ganar posiciones, ninguno lo consiguió y Sebastian Vettel se llevó la victoria por delante de Raikkonen y Ricciardo. Carlos Sainz finalizó sexto, justo por delante de Lewis Hamilton.