Los enfrentamientos iniciaron en la calle 11, cuando los manifestantes decidieron trancar la calle y llegaron contingentes de la Guardia Nacional Bolivariana
Las calles 9, 10, 11 y 14 de la parroquia El Valle amanecieron este martes con restos de barricadas, piedras y escombros en sus alrededores. Esto después de que se desarrollaran protestas que comenzaron a las 9 de la mañana del pasado lunes y que terminaron la madrugada de este martes.
Durante el día, las protestas no fueron permitidas. Un grupo de manifestantes se pudo concentrar en la Avenida Intercomunal de El Valle sin problemas y ahí desarrollaron su protesta, pero sin trancar la vía. A poca distancia, un grupo de oficiales de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) observaba el desarrollo de la protesta.
Pero a las 6 de la tarde la cosa cambió. Los enfrentamientos de los manifestantes con las fuerzas del orden público
iniciaron en la calle 11, cuando decidieron trancar la calle. Lograron permanecer un rato allí sin la intervención de los policías, pero igual se comenzaron a escuchar detonaciones, aunque lejos de ahuyentarlos, pareciera que les dio fuerzas para seguir protestando.
Entonces, se acabaron las contemplaciones: los policías dispararon bombas y perdigones, lanzaron piedras y recibieron piedras también.
“Los mismos policías les cayeron a bombas a los edificios. Trajeron dos tanquetas como a las 9:30 y los chamos las hacían retroceder. Las personas les gritaban ‘¡asesinos, asesinos!’ a los guardias, y ellos disparaban bombas y lanzaban piedras contra los edificios. A mi carro le partieron el vidrio. Yo te voy a decir una cosa, Petare y El Valle son una bomba de tiempo”, narró una residente de la zona que prefirió no relevar su identidad por temor a represalias.
Los efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) que llegaron a apoyar a los policías limpiaron las calles lo mejor que pudieron para no dejar rastros de barricadas en el lugar, pero no pudieron borrar los rastros de las protestas.
“El sábado ellos pusieron su toldo rojo ahí y no había ni 20 personas, eso es importante. Es muy significativo que las personas no salgan a defender la revolución”, comentó otra residente. Mientras los cuerpos de seguridad del Estado dispersaban a los manifestantes, desde varios edificios les gritaban y lanzaban cosas.
Como ya ha pasado en las residencias Terrazas de El Paraíso, los funcionarios intentaron meterse en los conjuntos residenciales, pero no lo lograron. No dejaron de lanzar piedras y malograron las instalaciones y los vehículos de los vecinos del sector.
Algunos afirman que a las 12 cesaron las detonaciones y los funcionarios se marcharon, otros que fue un poco más tarde. Incluso hay versiones que afirman que a las 3 de la mañana pasaron tanquetas por el sector disparando bombas a las residencias.