En un presunto enfrentamiento con funcionarios del Cicpc murió el martes Gilbert Alejandro Sosa Arellano (19), mototaxista que trabajaba en una línea ubicada en Las Mayas.
Sus familiares denunciaron que el joven fue sometido cuando salió del urbanismo Cacique Tiuna en Coche, por una comisión que lo golpeó y le disparó, para luego ingresarlo sin vida en el hospital Periférico de Coche.
Esa mañana el joven estaba en las residencias socialistas donde vivía con su madre. Desde temprano había policías rodando la zona y ella le recomendó esperar un poco, pero el muchacho no le hizo caso y se marchó. Ella se fue detrás a los pocos minuto, porque una vecina fue a avisarle que los funcionarios estaban frente a las residencias.
Carmen Arellano, madre Gilbert dijo que su hijo fue a arreglar la tripa de un caucho de su motocicleta. Cuando abandonaba la primera etapa del urbanismo fue interceptado por los efectivos. Presuntamente no opuso resistencia, pero aun así fue golpeado y luego lo sacaron del lugar para apartarlo de los testigos. Más tarde apareció muerto.
Contó que a su hijo un policía lo estuvo hostigando y que por esa situación denunciaron el caso ante el Ministerio Público, pero nunca tomaron medidas al respecto. La moto del joven no aparece. Se la había regalado su hermano hace unos años.
Este es el tercer familiar que pierde a manos de la delincuencia. El 24 de agosto del 2013, su hermano Jenderson Arellano (32), fue asesinado y su cuerpo quemado junto a otros dos amigos dentro de su vehículo Chevrolet Aveo, en Caño Amarillo. Era bordador de insignias de uniformes en la Intendencia de la GNB.
Días más tarde, mataron a otro de sus hijos, Tonny Sosa (19), hermano de Gilbert, en un hecho de violencia del cual no preciso detalles. De sus tres hijos, solo le queda uno con vida.
