El servicio del Sistema Integral de Transporte Superficial (Sitssa) que conecta a la capital con los bajos mirandinos se reanudará este sábado
Con cambio de parada del Parque Miranda al terminal de Oriente, a partir de este sábado se restablecerá el servicio del Sistema Integral de Transporte Superficial (Sitssa) para desplazarse a Caracas desde Guarenas, Guatire, La Rosa, Nueva Casarapa y viceversa, paralizado luego de que el lunes 5 de este mes incendiaran tres unidades en disturbios ocurridos en Altamira.
La reanudación del servicio y cambio de parada fue anunciada por la empresa a través de su cuenta en twitter, @sitssa, “por el resguardo de pasajeros y unidades se hará el cambio de parada desde el sábado 10 de junio”.
Señalan además que mantendrán su compromiso con el pueblo trabajador para brindar un servicio óptimo, solidario y de calidad. “Asimismo les recordamos que es tarea de todas y todos cuidar nuestro patrimonio”.
Voceros del comité de usuarios informaron que tuvieron un encuentro con el presidente de la empresa, Esteban Sánchez, en la sede de la empresa, en el Terminal de Oriente.
Voceros presentes en la reunión señalaron que les anunciaron que, como medida de seguridad, la frecuencia en la llegada de las unidades se alargará y ya no se harán recorridos dentro de las urbanizaciones, sino que solo se desplazarán de un terminal a otro.
Víctor Fernández, vocero del comité de La Rosa, señaló que en toda la entidad se quemaron 12 unidades y en la ruta de Guarenas-Barlovento sufrieron daños 4 buses. “Y no se justifica que el usuario pague las consecuencias de esta manera, el Estado y la misma compañía deben ser los garantes de la seguridad de las unidades y de los pasajeros”.
Sufre el bolsillo
La suspensión de la ruta esta semana perjudicó el presupuesto de trabajadores que a diario usan este transporte, pues de 200 bolívares que cuesta el ticket en Sitssa tuvieron que pagar desde 1.200 a 1500 bolívares para llegar a Caracas. Muchos debieron pagar hasta 2 mil bolívares, que cobran algunos choferes aprovechando el desespero de quienes deben viajar a la capital.