La Unión Europea urgió este miércoles a poner fin «urgentemente» a la violencia en Venezuela, donde los acontecimientos de las víspera llevaron la situación «un paso más allá», indicó una vocera de la diplomacia europea.
«Esperamos que todas las partes ponga fin urgentemente a la violencia y eviten el uso de la fuerza», señaló en un comunicado Catherine Ray, portavoz del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE).
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, enfrenta desde el 1 de abril una ola de protestas de opositores que exigen su salida del poder, y que ya deja 76 muertos.
Y, en una nueva escalada de la violencia, el jefe de Estado venezolano puso en alerta a los militares después de denunciar un «ataque terrorista» con granadas el martes desde un helicóptero policial como parte de un supuesto plan de golpe de Estado.
«En los últimos tres meses, el pueblo venezolano ha experimentado una violencia y una represión cotidianas que ya han causado muchas víctimas», dijo la vocera comunitaria, para quien, con los acontecimientos del martes, «las tensiones y la violencia parecen haber ido un paso más allá».
Para los 28, la violencia dificulta «el camino hacia solución democrática pacífica», por lo que insta a las autoridades y a los actores políticos a buscar una solución «a través del diálogo, la voluntad política y el valor», agregó.
Venezuela «tiene problemas sociales, económicos, políticos y de seguridad urgentes, y el pueblo venezolano merece ver un final al conflicto político actual», subrayó Ray.
Las instituciones europeas reiteraron en los últimos meses su preocupación sobre la situación en Venezuela, urgiendo a Caracas a liberar «presos políticos», aceptar la entrada de ayuda humanitaria y convocar elecciones, y a todas las partes a retomar el diálogo.
La Eurocámara adoptó, en cambio, una posición más dura respecto a las autoridades venezolanas y su presidente Antonio Tajani pidó incluso que se consideren rápidamente «medidas específicas» contra el gobierno de Nicolás Maduro y su entorno.