El jefe de la Unidad de Batalla Bolívar Chávez (UBCh) en Caricuao y supervisor del Clap, José Gregorio Camacho Briceño, de 48 años, fue asesinado a cuchilladas dentro de su apartamento en las residencias Brisas del Ávila, en Telares de Palo Grande, entre la noche del lunes y la madrugada del martes.
La víctima era transgénico y se ganaba la vida como barbero. Vivía en ese urbanismo donde residen otros de sus familiares, como madre y hermanos, aunque en inmuebles separados. La noche del lunes estuvo visitando a su progenitora y se fue de vuelta a su apartamento en el piso 15.
Esa noche algunas personas intentaron comunicarse con Camacho pero no respondía. El martes tampoco podían ubicarlo, así que una hermana insistió que debía ir a ver qué pasaba. Fue un hermano, de nombre Juan Camacho, quien finalmente se ofreció a subir a buscarlo porque tenían una copia de las llaves.
Cuando intentó introducir la llave notó que la puerta no tenía seguro. Ingresó y vio que todo estaba en completo desorden, comenzó a llamar al barbero a quien cariñosamente le decían “Josorro”. Se fue de prisa a la habitación y todo estaba en el suelo.
Cuando revisaba observó un pie que sobresalía de un montículo de ropa tendida en el suelo junto a la peinadora. Supo que se trataba de su hermano y que ya estaba muerto, porque todo el lugar estaba además impregnado de sangre.
Cuando llegaron las autoridades del Cicpc que acudieron ante el llamado de los policías que patrullan la zona, inspeccionaron el cadáver que estaba acuchillado. Tenía el arma blanca aún incrustada en una zona de la cabeza.
Del inmueble se llevaron comida, dinero, electrodomésticos y el teléfono celular de la víctima. Presumen que quien cometió el crimen lo conocía porque no había signos de violencia en las cerraduras.