La abogada Jackeline Herrera denunció que el joven fue liberado de forma irregular, pues no notificaron a abogados y familiares y lo dejaron en la Plaza Francia de Altamira casi a la media noche
Luego de su liberación la noche del martes, el violinista Wuilly Arteaga se presentó ante el tribunal 31 de control, donde se le impusieron las medidas sustitutivas de libertad de presentación cada ocho días y prohibición de acudir a manifestaciones.
Su abogada, Jackeline Herrera, del Foro Penal Venezolano, informó que al joven se le acusa de instigación pública y detentación de sustancias incendiarias, razones por las que se mantiene una investigación en su contra.
Destacó que su liberación fue realizada de forma irregular, pues no notificaron a abogados y familiares y lo dejaron en la Plaza Francia de Altamira. Asimismo, la defensa solicitará una revisión médica por un forense, pues Arteaga tiene una dificultad auditiva en un oído, tras un golpe que recibió el día de su detención.
«Liberado por medida cautelar violinista Wuilly Arteaga, luego de solicitud hecha por el Ministerio Público venezolano y acordada por tribunal de la causa», informó la noche del martes el fiscal general designado por la Asamblea Nacional Constituyente, Tarek William Saab, en su cuenta de Twitter.
Alfredo Romero, director de la ONG Foro Penal y quien sigue el caso del violinista, también denunció que Arteaga fue dejado en medio de la noche por militares de la Guardia Nacional Bolivariana en Altamira.
«Libre Wuilly Arteaga y descandado ya», confirmó el abogado, quien aseveró que el informe de la liberación lo recibió del comandante del destacamento donde estuvo preso.
El vicepresidente del Parlamento, Freddy Guevara, celebró la liberación. «Que su música vuelva a llenar de esperanza al pueblo de Venezuela», expresó en Twitter.
Arteaga, de 23 años, fue arrestado el 27 de julio e imputado tres días después por «instigación pública y posesión de sustancia incendiaria» en una corte de Caracas.
Romero, sin embargo, negó que el joven tuviera consigo artefactos incendiarios y denunció que lo obligaron a presentarse con un defensor público, pese a que el Foro Penal ofreció representarlo.
Durante su detención, confirmó el abogado a la AFP, Aretaga fue «golpeado y torturado». «Lo golpearon brutalmente incluso con su propio violín. Perdió la audición en su oído derecho», detalló.
Símbolo opositor
Arteaga se convirtió en un ícono de las manifestaciones que exigen la salida de Maduro del poder, asegurando que con su violín quiere dar «un mensaje de paz» entre violentos disturbios que dejaron unos 125 muertos desde el 1º de abril.
El músico, que luce frágil, pequeño y delgado, suele llevar la bandera de Venezuela como capa en cada protesta la que asiste.
Unas 5.300 personas han sido arrestadas desde el inicio de las manifestaciones, de las cuales un millar sigue en prisión, según el Foro Penal.
El 22 de julio, el violinista también resultó herido en el rostro por perdigones durante enfrentamientos entre militares y manifestantes que estallaron tras una de protesta contra Maduro en Caracas.
«No me van a amedrentar. Vamos a seguir en la lucha», dijo en un video que difundió en Twitter, con los labios hinchados por las heridas.
Arteaga ganó notoriedad al tocar el violín en el funeral de un músico de 18 años, Armando Cañizalez, quien falleció el 3 de mayo tras ser baleado en una marcha opositora. Desde entonces, se volvió costumbre verlo ejecutar el himno nacional en las manifestaciones.
Nacido en Valencia, aprendió a tocar el violín en el Sistema de Orquestas Infantiles y Juveniles de Venezuela, exitoso plan estatal -fundado en 1975- destinado a chicos de zonas populares y cuya cara más visible es el prestigioso Gustavo Dudamel, director de la Filarmónica de Los Ángeles.
El joven se ganaba la vida tocando en la calle. Por ello lloró amargamente cuando una militar le rompió su instrumento durante una marcha el 24 de mayo.
Las fotos de lo ocurrido inundaron las redes sociales e inmediatamente recibió varios violines de regalo. Artistas internacionales como el español Alejandro Sanz y la colombiana Shakira se solidarizaron con él.
La vida le cambió. Por invitación de organizaciones no gubernamentales viajó a Estados Unidos para mostrar su talento e incluso visitó la sede de la ONU.
(Con información de Álex Vásquez / AFP)