Cerca de 200 personas se congregaron el domingo en Rio de Janeiro para manifestar contra la violencia y recorrer las calles de la favela de Jacarezinho, donde los enfrentamientos armados entre policías y narcotraficantes dejaron siete muertos en los últimos días.
«Vivimos con miedo, las personas tienen miedo a salir de sus casas porque saben que pueden ser alcanzadas por balas perdidas», se lamenta Carmen Camerino, de 49 años, quien participa en la Marcha por la Paz, organizada por la ONG Observatorio de Favelas.
Según los servicios de salud municipales, dos personas murieron el sábado, una mujer de 50 años y un hombre de 24. Otras tres resultaron heridas, una de ellas grave.
AFP