“Caracas se cae a pedazos y aún no ha temblado”, manifestó el presidente de la Alianza del Lápiz, Antonio Ecarri, este viernes, tras denunciar el derrumbe de varias viviendas ubicadas en el callejón San Pedro de Altavista, en Catia, hecho que ocurrió el pasado lunes, pasada las 9:30 pm, y que dejó a más de 50 casas y 300 familias en total estado de vulnerabilidad.
Según el dirigente social, ocurrió lo que hace más de año y medio vaticinó, tras recorrer esta zona de altísimo riesgo, momento en que la calificó como el “emblema de la desidia” de la gestión de Jorge Rodríguez. “Esto se veía venir, son vecinos que tienen más de seis años pidiendo a gritos la ayuda de un alcalde que no se ocupa de Libertador”, precisó.
Ecarri, con preocupación, alertó que si tragedias como esta ocurren sin ser resultado de fuertes lluvias o sismos, qué puede esperarse si llegase a registrarse en Venezuela un terremoto como el que acabó con ciudad de México o temblores como los que se han registrado en otros estados del país en los últimos días.
Tras evidenciar que son los propios vecinos los que se han abocado a atender la emergencia, debido a que la Hidrocapital, Cantv y Corpoelec responde a sus exigencias con que no pueden actuar por ser zonas de alto riesgo; el portavoz opositor subrayó que urge también dotar a Protección Civil y Bomberos de Caracas para que así puedan enfrentar cualquier siniestro.
En tal sentido, el también presidente ejecutivo de la Fundación Arturo Uslar Pietri, reiteró su llamado de atención al burgomaestre capitalino para que instale cuanto antes una sala situacional para monitorear las 24 horas del días las zonas más afectadas del municipio, así como las escuelas de Libertador. Tenemos que evitar a toda costa que nuestros niños sean los más vulnerables ante una eventual tragedia natural que puede ocurrir en cualquier momento”, resaltó.