El Frente en Defensa del Norte de Caracas se pronunció contra la inversión que hiciera el gobierno del alcalde Jorge Rodríguez en remodelaciones de la Plaza Diego Ibarra, que alcanzaron la impresionante cifra de Bs.2.263.506.834,55.
Carlos Julio Rojas, coordinador del Frente en Defensa del Norte de Caracas, dice que los caraqueños ven con asombro que la Alcaldía haya «malgastado» la astronómica cifra, «en un momento en que Venezuela sufre una grave crisis económica y social, llevando incluso a personas a buscar alimento en la basura».
Afirmó Rojas que la Alcaldía de Caracas «se convirtió en la caja chica de Jorge Rodríguez para hacerse millonario y destinar recursos a la política del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv)».
Señaló que a pesar de haber sido inaugurada hace apenas tres meses, el Concejo Municipal de Libertador sigue aprobando dinero para una fuente interactiva ubicada en la céntrica plaza caraqueña.
“Por ejemplo, por moción de urgencia destinaron este 10 de octubre Bs.460.452.615,41 para la construcción la cuarta etapa de la obra y Bs. 115.119.526,00 que está en lista para ser invertido en los próximos días. Estos hechos son un insulto al pueblo que al abrir la nevera solo encuentra agua y luz”, dijo.
Rojas detalló que estas sumas milmillonarias de dinero son aprobadas por el Concejo Municipal a espaldas de los caraqueños, sin ningún tipo de contraloría o auditoría, echando estos recursos en un nido de corrupción.
“Jorge Rodríguez ha convertido en estos 8 años de gestión a la Alcaldía de Libertador en su banco personal para sacar dinero para proselitismo político y aún más grave, para enriquecerse, cuando en Venezuela el simple hecho de comprar un pedazo de pan se ha convertido en un suplicio”, alertó.
El vocero del Frente en Defensa del Norte de Caracas, también integrante de la Asamblea de Ciudadanos de Candelaria, explicó que a lo largo de los últimos años las obras de la plaza Diego Ibarra, ubicada en la parroquia Santa Teresa, se han transformado en un pozo sin fondo, en el cual mes tras mes destinan millones de bolívares sin que se vean reflejados en la estructura.
“El piso está gastado, la fuente interactiva recién inaugurada se encuentra botando agua sin un orden o compás musical, la inseguridad campea y los sótanos están en un estado deplorable. El alcalde Jorge Rodríguez debe darle la cara al pueblo y renunciar ante esta evidente malversación de fondos. Esta ha sido la peor gestión de un burgomaestre a lo largo de los 450 años de historia que tiene nuestra Caracas, una ciudad sumergida en basura, hampa galopante, caos de transporte, oscuridad en sus calles y mucho más grave un pueblo hambriento que no sabe si podrá comer al día siguiente”.