MADRID. La justicia española dictó este jueves prisión provisional para ocho miembros del destituido gobierno de Cataluña, imputados de sedición y rebelión por su papel en la tentativa independentista, desatando manifestaciones de apoyo en la región española.
La misma juez Carmen Lamela, de la Audiencia Nacional, debe pronunciarse sobre la petición de la fiscalía de dictar una orden de captura contra el presidente catalán cesado, Carles Puigdemont, y otros cuatro de sus ministros, que estarían en Bélgica y desatendieron el llamado de la justicia.
Lamela sí actuó contra ocho de los nueve miembros del ejecutivo cesado, entre ellos el vicepresidente Oriol Junqueras, que acudieron este jueves al alto tribunal en Madrid, enviándolos a prisión provisional sin fianza al considerar en el auto que jugaron «un papel activo, impulsando el proceso soberanista minuciosamente diseñado».