José Antonio Gil Yepes, directivo Datanálisis, manifestó que para las elecciones municipales convocadas por el Consejo Nacional Electoral (CNE) para el próximo 10 de diciembre, varios partidos de la MUD decidieron no participar “porque consideran que no hay condiciones por parte del ente electoral”.
“Para estas municipales, los partidos de oposición están solicitando abstención porque no hay condiciones, pero también es cierto que ellos están anonadados, divididos por apetencias individuales. Son muchas las organizaciones políticas que cambian estrategias sin consenso ni explicaciones y se ocupan de sus elecciones, pero pocos de acompañar al ciudadano en su tragedia diaria”, dijo Gil Yépes a través de una nota de prensa.
Señaló que por falta de estrategia y coherencia entre lo que dicen y lo que hacen, no se acusan a sí mismos por sus debilidades, sino al gobierno por sus arbitrariedades. “De seguir bajo este parámetro, la oposición regalará las alcaldías y una buena dosis más de legitimidad al régimen de Nicolás Maduro. Ojalá le hagan caso a Andrés Velásquez en lo de elegir al candidato presidencial de una vez, porque para marzo se les vienen esas elecciones encima y los pueden agarrar con los pantalones abajo, y nuevamente van a decir que no hay condiciones. El gobierno sigue en su proyecto de consolidar un país al revés con una crisis de inconvivencia”.
Asimismo el analista recordó que el “fraude” del oficialismo del 15 de agosto de 2004 no fue una manipulación de votos el día de la elección, fueron decenas de violaciones de la ley y trampas que hizo el chavismo por casi dos años lo que explicó su victoria. Pero la dirigencia opositora siempre partió de una falsa conseja: no hay que protestar esas violaciones, ”porque esto está ganado”.
Igualmente trajo a colación las elecciones de la Asamblea Nacional en el año 2005, cuando los partidos opositores no participaron. “Pocos días antes de esas elecciones, la oposición decidió no ir a las urnas alegando que no había condiciones; pero eso se sabía desde el comienzo de la campaña. Creo que el alegato de fraude sirvió para tapar que esas votaciones se perderían porque el promedio de candidatos por curul del oficialismo era de 1,1, mientras que el promedio de la oposición era casi 8 por la descoordinación opositora”.
15-O “votación inflada”
A juicio de Gil Yepes, las elecciones de gobernadores de 2017 el gobierno “jugó sucio” y pudo haber inflado su votación entre 0,5 y 1,0 millón de votos; en ese sentido consideró que esa derrota también se debió a la interpretación de 3 millones de opositores que decidieron no ir a votar, “porque les iban a hacer trampa”.
Acotó que esa pésima conseja cundió por la falta de conexión y credibilidad de la dirigencia de los partidos opositores que no convencieron a su gente de salir a votar.