«Mi esperanza es que logremos adelantar lo máximo posible en la agenda temática, y ¿por qué no? agotarla en los próximos meses, si hay la voluntad. Por nuestro lado la hay», destacó Santos.
PRENSA PRESIDENCIA DE COLOMBIA
El gobierno de Juan Manuel Santos anunció este lunes la reactivación de los diálogos con la guerrilla del ELN, suspendidos desde enero por el escalamiento del conflicto, con la intención de firmar la paz antes de dejar el poder en agosto.
Santos redobló la apuesta por el diálogo pese a la derrota que sufrió el oficialismo en los comicios legislativos del domingo a manos de la derecha que más rechaza su política de paz.
«He dado instrucciones al jefe del equipo negociador, Gustavo Bell, para que viaje a Quito y reactive la mesa de diálogo», señaló el mandatario en un mensaje a la nación.
El mandatario señaló que de entrada las dos partes retomarán las discusiones para buscar declarar un nuevo alto al fuego «amplio y verificable», que facilite un arreglo final.
El proceso con el que Santos intenta sellar una paz completa para Colombia, tras conseguir el desarme y transformación en partido de la exguerrilla de las FARC, había quedado en suspenso al término de una tregua bilateral de 101 días que expiró el 9 de enero.
Poco después el ELN – que según datos de inteligencia militar cuenta con unos 1.500 hombres – volvió a atacar a la fuerza pública y la infraestructura petrolera.
El gobierno respondió y desde entonces las partes entraron en una nueva espiral de violencia que ha dejado decenas de víctimas.
Al 6 de marzo habían muerto 34 insurgentes en operaciones militares y decenas más caído en manos de las autoridades, según el ministerio de Defensa.
De su lado, la agrupación guevarista ha propinado contundentes golpes con explosivos que dejan más de una docena de uniformados muertos.
Uribe pisó fuerte…
Álvaro Uribe se consolidó como el gran elector de Colombia.
No solo fue el aspirante al Congreso más votado, con 870.000 votos, sino que su partido dio un golpe de mesa en el parlamento y su ahijado político, Iván Duque, de cara a las presidenciales.
Con un mensaje de rechazo al acuerdo de paz con las FARC y el miedo a que Colombia se convierta en una Venezuela, Uribe logró posicionar a su partido Centro Democrático (derecha) como el más votado del Congreso.
Pese a que su victoria no fue la paliza que auguraban las encuestas, su movimiento se convirtió en la principal fuerza en el Senado al igualar su representación actual de 19 curules.
En la Cámara de Representantes tuvo la segunda lista más votada, por detrás del Partido Liberal. Allí aumentó sus sillas a 32, trece escaños más que actualmente.
«Es un personaje que desde que llegó a la presidencia en 2002 ha tenido un manejo de su carisma, en su forma de ser, que entra mucho en un sector de la sociedad colombiana», explicó Pedro Pablo Vanegas, experto en derecho electoral de la Universidad Externado.
Con Uribe seguramente votará Cambio Radical (centroderecha) y sectores del Partido Conservador, que han criticado apartados de lo convenido con los rebeldes comunistas.
Los tres movimientos suman 134 de los 280 curules en el parlamento. En la actual legislatura tienen 109 bancas. AFP