El afamado concurso de belleza Miss Venezuela aumentará controles y buscará a los responsables de las supuestas faltas éticas ventiladas en las últimas semanas por varias exparticipantes, informó hoy el presidente de Cisneros Media, Jonathan Blum, en una entrevista exclusiva con Efe.
Por Héctor Pereira / EFE
La idea es generar un «control adicional que evite cualquier actividad que sea contraria a la ética del certamen», del que han salido siete ganadoras del Miss Universo, y que será sometido a una auditoría de tiempo indefinido.
«Mientras más rápido podamos hacerlo (la revisión), mejor, pero en este momento no te puedo decir si son 30 días o si son 5 meses», dijo el empresario tras reiterar que la Organización Miss Venezuela no ha tenido conocimiento directo de las «denuncias graves» que se han publicado en las redes sociales.
Varias ‘exmises’ se han acusado de haber recibido favores de empresarios cercanos al Gobierno y de trabajar en el pasado para una fundación de Diego Salazar, un primo del expresidente de la estatal petrolera PDVSA, Rafael Ramírez, que está preso por supuesto lavado de dinero en la Banca Privada de Andorra.
Ante esto, los responsables del certamen han emitido dos comunicados este mes para desmarcarse de estos hechos y anunciaron hoy su decisión de cerrar temporalmente la afamada Quinta Miss Venezuela -donde se prepara a las participantes- y suspender la selección de aspirantes para los concursos de belleza femenina y masculina de este año.
«No vamos a hacer una investigación hacia atrás, es una revisión de todos los controles internos, de qué es lo que está pasando (…) conocer quiénes han sido los responsables», señaló hoy Blum al explicar el proceso de revisión y reestructuración «en el sentido más amplio» al que someterán al concurso.
En este sentido, informó que se designará una representante de las candidatas que canalizará «cualquier inquietud que alguna de ellas pueda haber sentido que se hayan vulnerado sus derechos», e indicó que este proceso estará abierto para «cualquier persona que haya tenido» relación con el concurso.
Asimismo, la organización busca blindar el documento de «buen comportamiento» que firman las jóvenes una vez son seleccionadas y espera que el nuevo comité de la belleza que se conformará al final de la auditoría vigile el «respeto hacia la mujer» y se rija por «los más altos valores éticos y morales».
Blum, sin embargo, reconoce que dentro de la ‘fábrica de reinas’ no tienen control «de todo lo que puedan hacer» todas las personas involucradas, por lo que esperan «esclarecer qué es lo que está sucediendo».
Con todo, el jefe de la corporación Cisneros Media no pudo asegurar que este año se realice la edición número 66 del Miss Venezuela, que logró un récord Guinness en 2009 al lograr que dos de sus ganadoras alcanzaran el título de Miss Universo de forma consecutiva.
Blum insistió en que las recientes denuncias representan «hechos aislados» pues son cientos de chicas las que han formado parte de la organización y «la mayoría ha tenido una súper grata experiencia, que ha sido el inicio de una carrera exitosa».
«Nosotros estamos es formando chicas responsables, que puedan servir a la sociedad, que no son solo bellas por fuera sino inteligentes, talentosas y con una belleza interna que representa el símbolo de la mujer venezolana», dijo y agregó que algunas denuncias «buscan manchar el nombre principalmente de algunas candidatas».
Los señalamientos entre las exparticipantes han tenido lugar mientras la Fiscalía venezolana investiga tramas de corrupción dentro de la estatal PDVSA que habrían ocasionado pérdidas de miles de millones de dólares al país petrolero, que desde hace más de cuatro años atraviesa una severa crisis económica y social.
«La Organización Miss Venezuela no mantiene ni ha mantenido relación alguna con la Fundación Diego Salazar», aseguraron fuentes del certamen en exclusiva para Efe. EFE