Al menos 11 muertos y 28 heridos dejó el jueves un motín en una cárcel de la localidad venezolana de Iribarren (oeste), informó este viernes la ONG Una Ventana a la Libertad, que defiende los derechos de los presos.
«Hubo un amotinamiento con resultado de once personas fallecidas, de las cuales dos custodios y nueve reclusos», y 28 heridos, dijo a la AFP Carlos Nieto, coordinador de la Organización No Gubernamental.
Los hechos se registraron en la Comunidad Penitenciaria Fénix, luego de que un grupo de reclusos le arrebatara el arma a un guardia y se desatara un tiroteo de unos 20 minutos, detalló la ONG en un comunicado que cita a familiares de las víctimas.
Un centenar de parientes de detenidos se hallaban este viernes en las afueras del penal solicitando información sobre lo ocurrido, constató la AFP.
En la morgue de la ciudad de Barquisimeto -a unos 13 km por carretera de la cárcel- otras personas identificaban a los fallecidos, varios de ellos con disparos y puñaladas.
«Sus condiciones son terribles (…), muchas heridas, puñaladas, disparos. Gracias a Dios mi hermano no está» entre las víctimas, relató a la prensa un familiar de un detenido, bajo anonimato.
Saga de muerte
Este motín se produce luego de que el pasado 28 de marzo 68 presos murieran en un incendio en unos calabozos policiales de la ciudad de Valencia (norte).
Las llamas fueron iniciadas por los propios detenidos para forzar a los custodios a abrir las rejas y escapar.
Nieto aseguró que este viernes el reclusorio de Iribarren ya estaba bajo control de las autoridades.
Según la ONG, los reos se alzaron al no recibir beneficios procesales, durante una jornada en la que autoridades ministeriales evaluaban retrasos en sus casos.
«Intentaron tomar por rehenes a varios custodios e incluso a la directora del penal», indicó Una Ventana a la Libertad.
En la Comunidad Penitenciaria Fénix se encuentra recluido el diputado opositor Gilbert Caro, detenido el 11 de enero de 2017 por supuestamente planificar «acciones terroristas».
Ramón Carmona, abogado de Caro, declaró a la AFP que no sabe nada sobre «la integridad física del diputado», con quien -dijo- se reunió hace 15 días y lo vio «muy deteriorado», con ocho kilos de peso menos.
«Hay una orden del 10 de abril para trasladarlo a la cárcel militar de Ramo Verde -en las afueras de Caracas- y no sabemos por qué no se ha materializado», añadió.
Nieto, sin embargo, descartó que a Caro le haya ocurrido algo durante el motín, pues está «aislado» de los demás presos.
Desde 2011, unas 400 personas han muerto violentamente en los reclusorios venezolanos, considerados entre los más peligrosos de la región, según cifras oficiales y de ONG de derechos humanos.
AFP
