La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares a un civil y cuatro militares venezolanos presuntamente torturados por agentes de la Dirección de Inteligencia Militar (Dgcim) desde su detención a comienzos de mes.
El secretario ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrão, escribió, en una carta fechada la víspera y publicada en Twitter el miércoles por la abogada solicitante Tamara Sujú, que «la comisión solicita al Estado de Venezuela que adopte las medidas necesarias para proteger los derechos a la salud, vida e integridad personal» de los cinco beneficiarios, reseñó AP.
La comisión, que tiene la facultad de solicitar a los gobiernos que protejan a ciudadanos en riesgo grave y urgente de sufrir un daño irreparable, dio al Estado venezolano un plazo de 15 días para que adopte las medidas cautelares requeridas.
The Associated Press solicitó un comentario a la misión de Venezuela ante la Organización de Estados Americanos (OEA), ente al que está adscrito la CIDH, sin recibirlo de inmediato.
Los beneficiarios de la medida son Antonio José Iabichela Barrios, el coronel José Romel Acevedo Montañez, el primer teniente Miguel Ambrosio Salazar Cabañas, el sargento Miguel Ambrosio Palacio Salcedo y el coronel retirado Oswaldo García Palomo, un agudo crítico del Gobierno venezolano, quien durante meses había expresado públicamente sus intenciones de agrupar una fuerza de militares en el exilio para derrocar a Nicolás Maduro.
El ministro del Interior venezolano, Néstor Reverol, identificó a García Palomo como uno de varios detenidos por presuntamente pertenecer a un grupo «terrorista» que buscaba asesinar a Maduro con apoyo de la CIA, del gobierno colombiano y del dirigente opositor Julio Borges.
La solicitud de medidas cautelares presentada por Sujú el 7 de febrero indicaba que García Palomo padecía «escoriaciones graves y profundas en ambas muñecas, ya que fue colgado por las esposas para golpearlo, presentando pérdida de sensibilidad en los dedos y hematomas en el tórax».
Asimismo, señaló que Iabichela tenía ennegrecida la rodilla izquierda y corría el riesgo de gangrena tras recibir una golpiza; Palacio Salcedo recibió martillazos en la uña del dedo índice del pie izquierdo; y que Salazar Cabañas presentaba pérdida de la visión del ojo izquierdo y hundimiento debido a un puntapié.
La comisión mantiene a Venezuela desde 2002 entre las naciones del continente cuya situación de derechos humanos requiere seguimiento especial.
El Universal