El Ministerio Público identificó este lunes a Alberto Miguel Rodríguez Mota, que se encuentra prófugo, como la persona que, presuntamente, pagó por el ataque con arma de fuego contra el expelotero de Grandes Ligas David Ortiz el 9 de junio en un bar de la zona oriental de Santo Domingo.
Así figura en el expediente de solicitud de medida de coerción contra uno de los implicados, Gabriel Alexander Pérez Vizcaíno (alias Hueso o Johan) donde la Fiscalía de Santo Domingo Este pide un año de prisión preventiva y la declaración de caso complejo, documento al que tuvo acceso Efe.
El texto indica que Pérez Vizcaíno fue la persona utilizada por José Eduardo Ciprián (alias Chuky), preso en una cárcel del país, para poner al grupo de sicarios en contacto con Rodríguez Mota, «persona que pagaría por la operación de sicariato, con quien discute el plan y los detalles del mismo».
Esa conversación se habría producido el domingo previo a cometerse el atentado criminal, es decir, una semana antes del hecho en el que además de Ortiz resultó herido el comunicado Jhoel Pérez.
Además, es la persona que recibe en su celular, el día del evento, una foto del «objetivo» enviada desde la cárcel por Ciprián, «su socio en el mundo del crimen», después de que el imputado Pérez Vizcaíno se reuniera minutos antes con el grupo criminal en una estación de combustibles de la avenida Venezuela para mostrarles una fotografía de la persona «que tenían que liquidar».
El individuo se montó con ellos en el vehículo conducido por Luis Alfredo Rivas Clase (alias El Cirujano) que se encuentra igualmente prófugo, y en el que también viajaba la nacional venezolana María Fernanda Villasmil Manzanilla, también huida de la justicia y que formaba parte del grupo criminal.
En el expediente, el Ministerio Público expone una serie de pruebas testimoniales y físicas y solicita prisión preventiva contra Gabriel Alexander Pérez Vizcaíno por espacio de un año «por la gravedad del caso y la peligrosidad del imputado».
Asimismo, solicita que el caso se declare complejo «a causa de la pluralidad de hechos, del elevado número de imputados o víctimas o por tratarse de casos de delincuencia organizada.»
La semana pasada fue enviado a prisión preventiva Rolfi Ferreyra Cruz, quien de acuerdo a las autoridades admitió haber disparado por la espalda y a quemarropa contra Ortiz, quien tuvo que ser intervenido quirúrgicamente en la capital dominicana y luego trasladado a Boston (EE.UU.) donde también fue operado.
Ciprián (Chuki) y Carlos Rafael Álvarez (alias Carlos Nike), señalados como los organizadores del ataque, cumplen prisión en una cárcel del sur del país por varios delitos.
En el grupo de implicados también están Eddy Blamidir Félix García, Porfirio Allende Deschamps Vásquez, Joel Rodríguez (alias Calamardo), Reynaldo Rodríguez Valenzuela (alias El Chino), Oliver Moisés Mirabal Acosta y su esposa Lanny Estefani Pérez Reyes.
Además, las autoridades también persiguen a Luis Alfredo Rivas Clase, apodado ‘el Cirujano’, a Marcos Díaz, y a la venezolana Villasmil Manzanilla.
La bala que hirió a Ortiz le salió por el abdomen y causó heridas en una pierna al comunicador Jhoel López, quien se encontraba compartiendo con el exjugador en el lugar, ubicado en el municipio de Santo Domingo Este, contiguo a la capital dominicana.
El ataque a Ortiz ha causado conmoción en el país y en Estados Unidos, principalmente, dada la gran popularidad del extoletero de los Medias Rojas de Boston, quien se retiró como jugador activo al terminar la temporada de las Grandes Ligas de 2016.
La operación que se le practicó en Santo Domingo entre la noche del domingo y la madrugada del lunes requirió la extirpación de parte de los intestinos grueso y delgado, del colon, del hígado y de la vesícula, según informaron los facultativos que la realizaron. EFE