La diputada Nicia Maldonado, representante de la etnia Yekuana, tachó al gobierno ecuatoriano de “fascista” y consideró que el paso atrás en las medidas económicas que desataron los disturbios en Ecuador son también un triunfo para los pueblos indígenas de Venezuela
Indígenas venezolanos marcharon este martes en Caracas para solidarizarse con sus “hermanos” de Ecuador, que protagonizaron dos semanas de protestas contra medidas económicas del presidente de ese país, Lenín Moreno, destacó un despacho de la agencia Efe.
“Estamos aquí para celebrar la victoria que ha obtenido el pueblo ecuatoriano”, dijo a Efe la diputada Nicia Maldonado, representante de la etnia Yekuana, en alusión a la derogatoria de una ley con la que Moreno había eliminado el subsidio a los combustibles.
La legisladora tachó al gobierno ecuatoriano de “fascista” y consideró que el paso atrás en las medidas económicas que desataron los disturbios en Ecuador son también un triunfo para los pueblos indígenas de Venezuela.
La manifestación venezolana estuvo marcada por un ambiente festivo en el que miembros de diferentes etnias mostraron signos de sus culturas con pinturas, accesorios y bailes.
Los presentes vistieron el tradicional color rojo que representa a la revolución bolivariana, gritaron consignas y mostraron pancartas con mensajes en contra de Moreno y del Fondo Monetario Internacional (FMI). “El FMI es enemigo del pueblo”, remarcó Ángel Montiel, de la etnia Wayú, quien viajó 700 kilómetros desde el estado Zulia para asistir a esta manifestación que recorrió ocho calles del centro de Caracas. “Estamos diciéndole al mundo que los pueblos indígenas del Ecuador no están solos. Es una sola lucha contra el imperialismo norteamericano”, dijo el hombre de 48 años.
Por su parte, el ecuatoriano Marcelo Andrade se dijo “contento” por lo que sucedió en su país, del que emigró hacia Venezuela hace 38 años. “Son resultados positivos, es un ejemplo para todos los demás países”, dijo el sexagenario, uno más entre las decenas de ecuatorianos que se sumaron a la marcha y ondearon la bandera de su país.
Ecuador retomó la normalidad una vez que el gobierno y los líderes de los indígenas movilizados llegaron a un acuerdo la noche del domingo, que puso fin a las protestas, muchas de ellas de un nivel de violencia nunca antes visto en ese país.
En medio de las protestas radicales, incendiaron el edificio de la Contraloría General del Estado, saquearon locales, quemaron vehículos y atacaron sedes de medios de comunicación.