En Bogotá la ola de disturbios y saqueos que fue creciendo en horas de la noche de ayer provocó la decisión de decretar un toque de queda. Inicialmente el control militar se aplicó en tres localidades: Bosa, Kennedy y Ciudad Bolívar, ubicadas al Sur de la capital, pero la situación de violencia obligó a extender la medida a toda la capital, incluyendo el municipio de Soacha que integra el área metropolitana
El segundo día de paro se caracterizó por el bloqueo de tránsito en diferentes puntos de Bogotá, donde se registraron choques entre manifestantes y policías.
Se produjeron ataques al sistema de transporte Transmilenio que debió ser custodiado por el ejército, mientras en la Plaza Bolívar un cacerolazo fue repelido con gas lacrimógeno Saldo. El parte oficial del viernes superó con creces las estimaciones que al final del jueves reseñaba el director general de la Policía de Colombia, Óscar Atehortua, quien contó 28 policías heridos.
Tras los disturbios nocturnos y cacerolazos que duraron hasta tres horas en algunas localidades, el reporte dio cuenta de 273 heridos (22 civiles y 151 agentes del orden), así como 98 detenciones, reseñó AFP. Durante su reporte a la ciudadanía, el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, expresó desde la Casa de Nariño que “el país está tranquilo”.
Dijo que el Gobierno investiga 11 denuncias de “posibles actuaciones irregulares” por parte de policías en Bogotá, Cali, Manizales y Cartagena. “De comprobar una falta, se aplicarán sanciones”, dijo. Amnistía Internacional aseguró tener “testimonios, fotos y videos sumamente alarmantes” del “uso excesivo de la fuerza” por parte de la policía.
Manifestantes. A través de un comunicado, el Comité Nacional del Paro expresó: “Ganó Colombia en esta jornada histórica de movilización ciudadana” y solicitaron a la presidencia una audiencia “inmediata” para dialogar acerca de los factores sociales, económicos, políticos y de seguridad por los que tomaron las calles.
La petición no obtuvo respuesta oficial, aunque el presidente Duque había reconocido la legitimidad de “algunos reclamos” y este viernes llamó a un consejo extraordinario de ministros.