Este infanticidio-suicidio ocurrió en la comunidad indígena Las Canoas, situada en el municipio Independencia, cerca de El Tigre
Girseida Idamelis Maigua Rivero, de 24 años, tomó la peor de las decisiones: le dio a sus hijos -de 5 y 2 años- un insecticida para envenenarlos y luego ella se suicidó al ingerir del mismo líquido.
Así determinaron las pesquisas y los análisis de laboratorio realizados por los expertos de criminología y forense del Cicpc que revelaron la causa de las tres muertes que enluta a una familia anzoatiguense.
Según el reporte del diario El Tiempo, este infanticidio-suicidio ocurrió en la comunidad indígena Las Canoas, situada en el municipio Independencia, cerca de El Tigre, al sur del estado Anzoátegui.
La madre de Girseida, Idamelis Maigua Rivero, fue quien halló la dramática escena en la vivienda de la mujer y los dos niños, este sábado 30 de noviembre, al observar los cuerpos con espuma en la nariz y en la boca.
Los tres cadáveres estaban en una cama.
Trascendió que la mujer había discutido con su marido y luego decidió la fatal acción.
Idamelis siempre recibía la visita de su hija y de los nietos, pero este fin de semana no fueron a su casa. Por ese motivo, la señora fue a la vivienda de Girseida, a quien encontró sin signos vitales junto a los pequeños.
Una comisión del Cicpc llegó a la casa de la joven madre y al realizar las experticias observaron una cantidad de yuca amarga y presumieron, en un principio, que el deceso se debió al consumo de ese tubérculo, pero luego determinaron que la mujer y sus hijos habían ingerido el veneno, informó Panorama.