La oferta de árboles navideños volvió a ser poca este año en todo Estados Unidos, dependiendo de la ubicación y el vendedor. La industria sigue recuperándose de la Gran Recesión y trata de recuperar a los clientes que optaron por árboles artificiales cuando la época se tornó particularmente difícil.
En la tienda de Sandy Parsons, en el Capitol Market de Charleston, los clientes en busca del árbol de Navidad perfecto por lo general echan un vistazo a la oferta limitada que tiene y continúan su marcha.
Parsons nunca recibió su orden de 350 árboles de una granja de Carolina del Norte. Hay escasez de suministro, le dijeron. En su lugar, ella recibió unos cuantos árboles más pequeños para su lote. Lucen insignificantes en comparación con los imponentes y más bellos árboles que se ofrecen en el local de al lado.
“Esta ha sido la peor temporada”, lamentó Parsons. “Hemos perdido mucho dinero por eso. Nos remonta a dos o tres años”.
Funcionarios de la industria dicen que no hay nada de qué preocuparse: Todo quien desee un árbol de último momento debería ser capaz de encontrarlo. Sólo que la búsqueda podría llevar más tiempo, en especial si los clientes buscan un tipo de árbol específico, y uno podría terminar pagando un poco más.
El mejor consejo, afirmó Amy Start, directora ejecutiva de la Asociación de Árboles de Navidad de Michigan, es simple: “Compren con tiempo”.
Parsons ha trabajado en esto durante 42 años como vendedora de artículos de temporada como flores, productos agrícolas, calabazas y este año apenas 32 árboles de Navidad.
“Les puedo decir cuántos no compré: 350”, declaró Parsons, cuya decepción ha sido atemperada por las buenas ventas de coronas navideñas.
En el lote contiguo, Robert Cole pasa por una temporada feliz preparando una gran cantidad de árboles para ser cargados a los vehículos de sus clientes.
¿La diferencia? El lote de Cole, French Creek Farms de Buckhannon, siembra sus propios árboles. “Hemos estado más ocupados que nunca”, declaró Cole.