Venezuela es un país lleno de tradiciones, cuando se acercaba diciembre todos acostumbraban a ir preparando sus hallacas, comprar una botella de whisky y poner el arbolito de navidad para forrarlo de regalos, pero en medio de las crisis las tradiciones han quedado a un lado
No importa si estás al oriente o al occidente del país el venezolano dice lo mismo donde se pare, estás son las navidades más triste que han pasado en toda su vida, cuenta que antes preparaban más de 100 hallacas, porque como dice el viejo dicho, mas vale que sobre y no que falte, sin embargo esto ha quedado en el olvido, ya que lo que se hace es contado, esperando que alcance para todos.
Mientras muchos esperaban para comprar una botella de whisky ahora compran cocuy una de las bebidas mas baratas, además de ello, cuentan la mayoría como la tradición de colocar regalos se quedó en el olvido, por no mencionar el juego de amigo secreto.
Los importes de la comida al detalle en los comercios de Venezuela se duplican en cuestión de días e incluso horas. El café, el pan, el azúcar, las especias, todo sube. Es una enajenación conocida en términos económicos como como hiperinflación.
Maritza Díaz, una ama de casa de 72 años, está triste sobre los precios de los productos que se exhiben y ha dicho una frase que define las navidades de todos los venezolanos» la navidad ya no sabe a navidad» .