Usuarios denunciaron que fallas de conectividad y largas colas son parte de los pasos para poder canjear los petros por alimentos y otros productos en la subregión
Colas de tres y más horas han tenido que soportar beneficiarios del petroaguinaldo en los Valles del Tuy, en el estado Miranda. El retraso, que se repite por igual en bodegas, puestos informales y abastos, se debe a las constantes caídas del sistema biopago.
La herramienta fue habilitada por el Banco de Venezuela y se ha convertido en la opción más viable para hacer efectivo el cobro del beneficio. Aunque no se hace efectivo en dinero, sino mediante la adquisición de productos.
De San Francisco de Yare, municipio Simón Bolívar a Santa Teresa del Tuy, municipio Independencia, a la demora para completar las transacciones se ha sumado el alza de los precios. Para muchos consumidores, todo esto parece indicar que el método a través del biopago no estaba listo para su uso de forma masiva.
Usuarios denuncian que los locales en los que está instalado el dispositivo cualquier producto puede costar hasta tres veces más que en el resto de los establecimientos. “Cada persona tarda entre 5 y 20 minutos en que el sistema lea la huella y haga cobro. La conexión se cae a cada rato, eso sin contar que desde que se supo que se podía usar el biopago para pagar con petros en los negocios empezaron a subir los precios”, relató Ángela Hernández, residente del sector Cartanal en el municipio Independencia.
En Cúa, municipio General Rafael Urdaneta, y en Charallave, municipio Cristóbal Rojas, las colas también son comunes desde el pasado miércoles, día de Navidad, cuando se empezó a divulgar una lista de comercios en los que se puede cancelar con petros. “En lo que supe que se podía gastar en comida me fui a gastarlo. El primer día no se hacía tanta cola, porque la gente no está acostumbrada a esta forma de pago. Muchos no sabían si se los descontaba de la cuenta del petro. Ha faltado información de cómo usarlo”, recriminó Tibisay Moreno, residente del sector La Fila en Cúa.
Desconectados
Las fallas en la conexión a Internet y en el suministro de energía eléctrica son otros de los obstáculos que los consumidores enfrentan para el uso de la tecnología. El biopago es una modalidad implementada desde hace más de cuatro años. Sin embargo, su uso estaba reducido a un mínimo de operaciones de clientes del Banco de Venezuela, proveedor de la plataforma.
A diferencia del punto de venta, que utiliza una red propia vía telefónica, el biopago usa una conexión de Internet para realizar la confirmación de la transacción. En zonas de los Valles del Tuy, la electricidad falla al menos una vez al día y el Internet se satura por el escaso ancho de banda. “En un local esperé media hora para que conectara. Necesitaba los productos y no tenía otra forma de pagar, supuestamente era por el Internet”, señaló Josefina Castellanos, habitante de La Estrella en Charallave.
Solo uno de cada diez locales comerciales en los terminales de Charallave y Cúa poseen el dispositivo. Debido a esto, las largas colas no solo han implicado un trabajo adicional en estas fechas, sino una disminución de los inventarios.
Algunos consumidores compararon las extenuantes colas y el caos ocasionado en algunos puntos, con el llamado “Dakazo” o la expropiación de juguetes. En ambos eventos, la intervención del gobierno en la reducción de los precios ocasionó largas colas de compradores que aprovecharon el descuento. Sin embargo, solo Daka sobrevivió a la súbita reducción de sus inventarios.
RECUADRO
Adecuación
Una queja recurrente entre los compradores tuyeros fue la escasez de comercios habilitados para transar con petros. El reclamo se centró sobre todo en Farmatodo, por ser la única red privada comercial con presencia en cinco de los seis municipios de la mancomunidad y que dispone de mercancía de varios rubros de la cesta básica, además de medicinas.
La cadena de farmacias de autoservicio informó, a través de un mensaje en su perfil en la red social Twitter, que adelantaban el trabajo de adecuación tecnológica de sus sistemas de cobro para admitir el cobro en petro mediante el biopago.
Joselit Ramírez, superintendente de Criptoactivos y actividades conexas de Venezuela (Sunacrip), avaló esta versión. Además, confirmó que no todos los comercios con biopago están habilitados para transacciones con petros.
“Farmatodo tiene una plataforma de trámite de pago que se llama Megasoft; el biopago se conecta a esta plataforma; una vez que Megasoft realice las adecuaciones tecnológicas, los monederos petros estarán activos y funcionales en los biopago de todos los Farmatodo. Hay que darle unos días”, aclaró.
Jesús Barreto A./El Pitazo