El Louvre de París estaba cerrado el viernes debido al bloqueo de un grupo de empleados en huelga que protestaba contra la reforma del sistema de pensiones del gobierno francés, impidiendo la entrada al museo más visitado del mundo.
«Es en la Pirámide del Louvre, en el mismo lugar donde el presidente Emmanuel Macron eligió consagrar su elección, donde se alza contra él un frente de oposición sindical contra sus directrices desastrosas en materia de pensiones», escribió en un comunicado la intersindical, que reúne a cuatro sindicatos.
Más de un centenar de manifestantes bloqueaba la entrada principal de la pirámide de cristal, agitando banderas y coreando: «¡Seguiremos hasta (lograr) la retirada!» del plan de reforma. Invitaron a los turistas apiñados detrás de las vallas de seguridad a asociarse al movimiento: «¡Los turistas con nosotros!»