Un ministro francés advirtió el sábado que grupos sediciosos empeñados en provocar violencia estaban desviando la movilización contra la reforma jubilatoria, después que un incendio dañó un conocido restaurante parisino del que es cliente asiduo el presidente Emmanuel Macron.
Los bomberos dijeron que las llamas que ennegrecieron una esquina del restaurante La Rotonde fueron extinguidas rápidamente. La fiscalía parisina inició una investigación sobre la causa del incendio.
Pero Marlene Schiappa, secretaria de Estado para la igualdad, dijo que las llamas “probablemente” fueron producto de un acto criminal.