Arnaldo Moncada, director de arte y pedagogía del Ministerio de Educación, aseveró: «No tenemos dinero para recuperar las instalaciones. Es difícil tener el presupuesto con el problema económico que vive el país»
Estudiantes, padres y representantes, junto a trabajadores de la Escuela Superior de Música José Ángel Lamas, se reunieron para discutir situación de las clases, luego que el Ministerio de Educación ordenara la suspensión inmediata de las actividades, alegando que las instalaciones de la institución no están en buen estado.
Profesores de esta escuela de música, que funciona en el país desde hace 150 años, detallaron a un equipo periodístico del diario Tal Cual que la orden del gabinete fue verbal hacia el directivo de la casa de estudios. Otra de las preocupaciones de los docentes es que no han sido informados sobre una posible reubicación o si la estructura será remodelada.
Entre los años 2013 y 2014, el gobierno del presidente Nicolás Maduro prometió la restauración de los espacios y no cumplió; razón por la cual las clases se impartían en la Biblioteca Nacional. «Se nos dijo que el trabajo duraría dos años. Pasaron casi seis y la estructura está peor», denuncian profesores de la Escuela de Música José Ángel Lamas. Al mismo tiempo, detallan que en el recinto hay un solo toma corriente, porque la cablería y las instalaciones internas fueron robadas.
Por otra parte, profesores y estudiantes comentan que desde antes de septiembre de 2019 el aire acondicionado de la Biblioteca Nacional se dañó y, por esa razón, se interrumpieron las clases. Aclaran que en el lugar donde se dictaban las clases (sótano dos de la Biblioteca Nacional) había contaminación del aire.
Agregaron que, tras la suspensión de las clases, se hicieron todos los trámites para buscar soluciones y aunque se les prometió una respuesta para el 1º de diciembre, nada prosperó.
Según lo expuesto por los educadores, posteriormente, el Ministerio de Cultura puso a disposición recursos y espacios de otras escuelas del país para que algunas clases pudiesen impartirse fuera de la sede histórica.
Explicaron que el plan inicial era iniciar clases en la estructura ubicada en la avenida Urdaneta, al oeste de Caracas, y agilizar toda la logística para que menores de edad y estudiantes con alguna limitante motora pudieran asistir a los espacios prometidos por la cartera ministerial. Mientras que los adultos continuaría en este edificio. «Se perdió el primer trimestre del año. Primera vez en 150 años que la escuela no inicia. Por la presión de los estudiantes, padres y docentes tomaron estos espacios y reacomodarlos junto a todos los que quisieran ayudar», relataron profesores de la Escuela Superior de Música.
No hay dinero
Arnaldo Moncada, director de arte y pedagogía del Ministerio de Educación, aseguró que «al transformar esto de un problema político educativo a un problema político partidista no estamos ayudando a la escuela». En este sentido, desestimó informaciones que transcendieron en redes sociales sobre la supuesta suspensión de las clases en la Escuela Superior de Música José Ángel Lamas.
Al respecto, fue enfático al advertir que, «en ocasiones», los mensajes se tornan partidistas cuando se difunden por redes sociales. «Si nos organizamos, es posible que la infraestructura la podamos recuperar. Dentro de este problema tenemos que las personas ideales para la reparación de patrimonio están en Francia, en la reparación de Notre Dame», alegó el funcionario del Ministerio de Educación.
Sin embargo, aseveró: «No tenemos dinero para recuperar las instalaciones. Es difícil tener el presupuesto con el problema económico que vive el país». El funcionario del Ministerio de Educación dijo que los expertos para restaurar la edificación están fuera del país colaborando en los trabajos para recuperar la catedral de Notre Dame, en Francia. Esto pese a que la remodelación de la Escuela Superior de Música José Ángel Lamas es un proyecto que lleva años en el olvido por parte de las autoridades.
Por su parte, Maricarmen Vegas, supervisora nacional del Ministerio de Educación, aseguró que el Estado garantiza el derecho a la educación del país. Así como también de la seguridad en las instituciones educativas. «No se pueden parar las clases», dijo y al mismo tiempo recordó que parte de las soluciones que han puesto sobre la mesa ha sido un plan de contingencia que consiste en que las clases sean impartidas en otros espacios.
La comunidad de estudiantes, profesores, padres y representantes de la escuela de música esperaban que de la reunión surgieran soluciones al inconveniente. Sin embargo, el encuentro terminó en más promesas.
Los funcionarios del Ministerio de Educación prometieron que las propuestas de quienes hacen vida en la institución serían elevadas a las autoridades y posteriormente se intentaría hacer nuevas convocatorias.
Roison Figuera/Tal Cual