Niños y jóvenes pertenecientes a las escuelas que comprenden los 17 circuitos escolares conformados en el municipio Plaza, desfilaron sus fantasías por las calles de la ciudad
La música, el color y la alegría se hicieron presentes en el desfile de comparsas circuital escolar 2020 en Guarenas, evento en el cual niños y jóvenes pertenecientes a las escuelas que comprenden los 17 circuitos escolares del municipio Plaza desfilaron sus fantasías al ritmo de la samba y el calipso.
Deyanira Toro, supervisora del Circuito; Jaqueline Pérez, directora circuital; Grégory Rojas, director de Educación en Plaza; y Zulay Contreras, directora de Educación Especial en Plaza, acompañaron a la comparsa del circuito número 10, Camila Capote, que arrancó desde el CEIN Irama Martínez de Orta. Igualmente, las alegorías de escuelas como el CEI Juan Bautista Arismendi, el Simoncito Doña Menca, la U.E.P. Doctor José Gregorio Hernández y la E.B. La Montañita recorrieron las calles en la comparsa que concluyó en la E.I.B. Judith Daló Sandom.
Grégory Rojas, director de Educación en Plaza, saludó y dio la bienvenida a los presentes, reiterando en su mensaje el apoyo por parte del gobierno de Plaza y su alcalde Luis Figueroa, a todas las actividades culturales y recreativas propias de las fiestas carnestolendas propuestas a realizarse en los próximos días.
Corazón Llanero
Desde los espacios de la E.I.B. Judith Daló Sandom, donde finalizó el desfile, se llevó a cabo el Festival Musical Corazón Llanero, como actividad pedagógico-académica para fomentar en los niños el sentir la venezolanidad y amor por el sentimiento nacional a través de las coplas, cantos y bailes llaneros.
Joasni Malavé, representante de uno de los niños participantes, saludó la iniciativa cultural, describiendo estos encuentros como oportunos y necesarios para fomentar la cultura en la nueva generación.
Asimismo, Yuliana Moreno, de 13 años, participante del festival, dijo: “Me encanta estar aquí y participar de este festival musical tan bonito y de la caravana, donde todos los niños pudieron lucir sus disfraces, que muchos fueron hechos a mano y con ayuda de nuestros padres”, dijo asimismo Yuliana Moreno, de 13 años, participante del festival.